El gobierno nacional –en silencio– amplió de facto el cupo de exportación habilitado de trigo 2022/23 con el propósito de hacerse de dólares ante la escasez de divisas presente en el mercado cambiario.
Si bien el último comunicado oficial señala que está habilitado un cupo de exportación de trigo 2022/23 de 2,0 millones de toneladas, a la fecha se registraron embarques del trigo que comenzará a cosecharse en diciembre próximo por 2,61 millones de toneladas.
En lo que va del presente mes de febrero el Banco Central (BCRA) reforzó el cepo cambiario, lo que implica que la posibilidad de obtener dólares al tipo de cambio oficial para concretar importaciones es nula o muy limitada.
En ese contexto, uno de los pocos mecanismos con los que cuenta el gobierno para hacerse de divisas es la resolución 78 del Ministerio de Agricultura, vigente desde octubre de 2019, por medio de la cual los exportadores de productos agroindustriales están obligados a abonar al menos el 90% del derecho de exportación correspondiente dentro de los cinco días hábiles desde la registración de las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE), lo que implica, en los hechos, que el impuesto debe pagarse por adelantado.
De esta manera, entre el 2 y el 9 de febrero las 2,61 millones de toneladas registradas de trigo 2022/23, con embarque a partir de de diciembre próximo, generaron una recaudación de 82,9 millones de dólares en concepto de retenciones anticipadas. Puede no parecer una gran cifra, pero todo suma en un momento en el cual las reservas netas internacionales del BCRA son prácticamente nulas.
Existe un aspecto llamativo sobre los precios FOB determinados por el Ministerio de Agricultura, que son, precisamente, los valores a partir de los cuales se determinan los derechos de exportación. Mientras que entre el 2 y el 9 de febrero el FOB oficial de trigo argentino disponible (spot) se ajustó de 307 a 310 u$s/tonelada, el correspondiente al trigo 2022/23 pasó de 290 a 298 u$s/tonelada, es decir, subió 8 u$s/tonelada versus 3 u$s/tonelada la posición spot.
Vale recordar que el cobro de retenciones anticipadas, si bien permite, justamente, anticipar ingresos, genera el efecto contrario durante el período habitual de recaudación de impuestos a la exportación.