Casi como una paradoja en cuestiones de salud, pero una empresa multinacional vinculada al tabaco, los cigarrillos y todo lo que implicó históricamente para los pulmones, anunció que está desarrollando una posible vacuna para la pandemia que justamente pone en vilo a los órganos de la respiración de todo el mundo.
Se trata de British American Tobacco, mundialmente conocida por las marcas Lucky Strike o Pall Mall, y que en Argentina, a través de Nobleza Picardo, es dueña de Jockey Club o Camel. En su planta de biotecnología que tienen en Kentucky, Estados Unidos, está desarrollando una posible vacuna para el Covid-19, que ya está en fase de pruebas preclínicas.
Lo curioso es que la Kentucky BioProcessing (así se llama la empresa biotecnológica del grupo, KPB, sus siglas) “fabrica” las vacunas “dentro” de las plantas de tabaco. La British American Tobacco tiene patentada una biotecnología que básicamente consiste en el desarrollo de los antígenos dentro de las hojas de rápido crecimiento de esa planta, algo que es mucho más rápido que los métodos tradicionales. Así los elementos de la vacuna se acumulan en las plantas de tabaco rápidamente, en menos de seis semanas, frente a los varios meses que demandan los métodos convencionales de multiplicación.
A su vez, es mucho más seguro, pues las hojas de tabaco no pueden albergar patógenos que causen enfermedades humanas.
En este caso puntual, la BAT asegura que se habría logrado clonar una parte de la secuencia genética del coronavirus y a partir de allí se desarrolló un posible antígeno. Este antígeno es el que “metió” en la planta y ahora ya lo tiene listo para empezar las pruebas pre clínicas. La compañía promete “fabricar entre 1 y 3 millones de dosis de la vacuna por semana, a partir de junio” si esos ensayos salen bien y si además encuentra “socios adecuados y el apoyo de las agencias gubernamentales”.
“El desarrollo de vacunas es un trabajo complejo y desafiante, pero creemos que hemos logrado un avance significativo con nuestra plataforma tecnológica de plantas de tabaco, y estamos listos para trabajar con los gobiernos y todas partes interesadas para ayudar a ganar la guerra contra Covid-19″, asegura David O’Reilly, director de investigación científica de British American Tobacco.
¿Será el tabaco, paradójicamente, entonces quién nos cure de la pandemia de los pulmones?