Los productores brasileños volvieron a recibir “premios” por la soja tanto por factores cambiarios como comerciales frente a la mirada “angurrienta” de sus vecinos argentinos.
La devaluación del real brasileño mejoró de manera notable el precio recibido por la soja –considerando la referencia del puerto de Paranaguá–, el cual pudo regresar a los niveles presentes dos semanas atrás.
Al disponer de una macroeconomía ordenada –la inflación anual es del 4,2%–, el gobierno de Brasil puede gestionar la política monetaria para mejorar la competitividad de los sectores exportadores en general y de la agroindustria en particular.
Adicionalmente, la demanda china se está mostrando particularmente activa en Brasil quizás para reabastecerse de poroto ante la muy probable victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EE.UU. en noviembre próximo. La entidad que agrupa a los exportadores brasileños (Anec) prevé que en el presente mes de julio embarcará 10,4 millones de toneladas de poroto versus 8,60 millones en el mismo mes de 2023.
Si Trump resulta victorioso en las elecciones, en 2025 es muy factible que reinicie (tal como hizo durante su primer mandato) una “guerra comercial” con China, lo que obligaría a la nación asiática a aplicar sanciones orientadas a impedir el ingreso a su territorio de productos agroindustriales estadounidenses.
En ese contexto, los exportadores brasileños están privilegiando los embarques de soja para aprovechar el momento, al tiempo que las colocaciones de maíz vienen más frenadas. Y eso se refleja en los precios ofrecidos en el mercado.
Argentina, por su parte, es el espejo inverso de lo que sucede en Brasil, dado que las exportaciones de poroto de soja vienen flojísimas: en lo que va del presente mes de julio apenas se registraron declaraciones de embarques de soja por 226.179 toneladas.
Sin embargo, Argentina viene privilegiando las exportaciones de maíz para poder anticipar la mayor cantidad posible de embarques antes del inicio de la “temporada alta” comercial del maíz tardío brasileño.
La devaluación también le sube los arriendos, los insumos, el precio de la maquinaria, repuestos, seguros, mantenimiento, fletes y costo de vida.
No es una devaluación “quirúrgica diferenciada”.
Los Brasileños son descendientes de Portuguéses (Fenicios) y Africanos, ambos grandes comerciantes.
Hacer comercio exterior con Brasileiros está a la par de los Taiwaneses, da gusto !!
Preocupante.
Por los desafortunados programas de desarrollos Agrícolas de Arg.Sin descontar el tema logístico ,lo cuál continúa sin rumbos.El Agro ,plantea una viejísima discusión, Egocentrismo,sin diálogos,sin proyectos ciertos,tampoco diversidades,y lo más preocupante…Especulaciones … Sí o SÍ.
CONCLUCIÓN….SE PIERDEN BILLONES DE DINERO, SIN CONTAR CON NUEVOS MERCADOS.
Obviamente el nuevo Estado Nacional, tampoco dió condiciones de innovación,nuevos programas, desregulación de impuestos, Creación de NUEVOS Puertos de Embarques,…. pero Aún se esperan … Milagros del campo