En esta sección tomamos prestadas, citando la fuente, notas periodísticas que nos parecen muy oportunas e interesantes. Es el caso de esta crónica de Sebastián Ramírez, publicada por el sitio especializado Portal Frutícola.
El título ya lo dice casi todo. Solo le agregamos lo de “siempre aparece algún argentino”, porque de esto da cuenta esta misma crónica periodística, que debería poner en alerta a muchas empresas y funcionarios ligados con el sector frutihortícola local con exportaciones frecuentes hacia países de la Unión Europea.
Esta es la crónica robada:
“Un nuevo informe de Europol sobre las redes criminales más peligrosas de la Unión Europea revela que el narcotráfico está implicado en la mitad de ellas y que las empresas ilegales se han aprovechado de numerosas industrias legítimas, incluido el comercio de productos frescos.
Los exportadores latinoamericanos han informado a PortalFruticola.com sobre su preocupación, ya que grandes interceptaciones de estupefacientes están afectando a los envíos de fruta en puertos de todo el mundo.
El informe de Europol, la agencia policial de la Unión Europea, afirma que las redes criminales han utilizado de forma ingeniosa estructuras comerciales legales para facilitar y ocultar su actividad delictiva y blanquear su dinero, un esquema que parece haberse infiltrado en las exportaciones de fruta.
Un ejemplo destacado en el informe se refiere a las exportaciones de bananos de Ecuador, donde las redes de narcotráfico utilizan como medio a algunas empresas fruteras.
El caso habla de un empresario italiano de origen argentino residente en Marbella, que utiliza sus empresas para ocultar tanto actividades de narcotráfico como de blanqueo de capitales.
“Dirige varias empresas, entre ellas una que importa bananos de Ecuador a la Unión Europea”, dice el informe. “Un cómplice albanés, con base en Ecuador, se encarga de la importación de cocaína de Colombia a Ecuador y de su posterior distribución a la Unión Europea”.
Las interceptaciones de drogas en las importaciones de plátanos en el Reino Unido y Europa han sido noticia en el último tiempo.
En febrero de 2023, las autoridades ecuatorianas incautaron 8,8 toneladas de cocaína en un cargamento de bananas con destino a Bélgica. Dijeron que el cargamento habría valido unos 330 millones de dólares en destino.
En agosto de ese mismo año, las autoridades españolas realizaron su mayor incautación de cocaína hasta la fecha: 9,5 toneladas métricas ocultas entre cajas de cartón de bananos procedentes de Ecuador.
La crisis generada por los cárteles de la droga no sólo afecta a la propia industria, sino a la seguridad del país en general.
La agencia AP informa que los tiroteos, homicidios, secuestros y extorsiones se han convertido en parte de la vida cotidiana, sobre todo en Guayaquil, ciudad portuaria del Pacífico y centro del transporte de bananas.
José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación Ecuatoriana de Exportadores de Banano (AEBE), afirma que la industria legal establecida en Ecuador es víctima de este problema. Dice que la responsabilidad no es sólo de la fuente, Sudamérica, sino de las autoridades europeas, que no están haciendo lo suficiente para reducir el consumo de drogas en la región.
“Esto tiene que ser tratado como un problema de salud pública y la drogadicción tiene que ser declarada una crisis de salud pública en la Unión Europea”, dijo Hidalgo a Portalfruticola.com.
“Comparten la responsabilidad de este problema, así que tienen que empezar a mirarse en el espejo y decidir qué van a hacer para reducir la demanda de cocaína”, afirmó.
Hidalgo se refirió al hecho de que las operaciones de estas redes delictivas no tienen fronteras, es decir que operan a escala internacional.
El informe de Europol también indica que las redes criminales más amenazadoras ejercen un fuerte control y concentración sobre sus operaciones delictivas. Es el caso de los agricultores de México, donde los productores y exportadores de múltiples productos frutícolas han sido extorsionados y presionados para que paguen cuotas a las organizaciones delictivas.
Otro informe del grupo holandés de investigación policial Politie & Wetenschap advierte de que partes del comercio de aguacate (paltas) en México, Perú, Colombia y Chile están siendo controladas por bandas criminales.
Las redes criminales belgo-holandesas, activas sobre todo en el tráfico de cocaína, operan cerca de los puertos de Amberes y Rotterdam, explica el informe, donde se han descubierto muchos cargamentos ilícitos procedentes de Sudamérica.
Una de las consecuencias para los exportadores de fruta latinoamericana ha sido el refuerzo de las medidas de seguridad de los contenedores importados en el puerto de Rotterdam.
El informe de Europol señala que estas operaciones delictivas podrían abarcar más de 40 países de todo el mundo.
Tráfico a gran escala. El tráfico de cocaína a gran escala desde América Latina a Europa está financiado por redes delictivas de las repúblicas de Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, y Serbia y Montenegro, según descubrió Europol.
“También han establecido una presencia muy fuerte en América Latina aprovechando las oportunidades de corrupción en los puertos clave y sus alrededores y en las compañías navieras”, detalla el informe. “Ejercen un control de principio a fin sobre el suministro de cocaína”.
Las conclusiones de Europol añaden que algunos de estos grupos también están especializados y/o muy implicados en la violencia excesiva, los secuestros y ejecuciones, la corrupción, el blanqueo de dinero, el tráfico de armas y explosivos y la falsificación de documentos.
Según el informe, la violencia se utiliza principalmente como represalia por cargamentos de droga perdidos o no finalizados, pero también para hacerse con el dominio del territorio y de la cadena de suministro.
Las redes criminales con miembros clave marroquíes también suelen operar en el tráfico de cocaína procedente de países latinoamericanos.
¿Quién dirige el narcotráfico desde Latinoamérica? A pesar que Sudamérica es el principal productor de cocaína del mundo, el informe de Europol señala que los miembros clave suelen dirigir las redes delictivas que operan en estos países desde Albania, Bélgica, Italia, Países Bajos, Portugal y España.
Sólo uno de cada 10 redes delictivas incluye a un nacional de un país latinoamericano, añade el informe.
AP News informó sobre un vendedor de Guayaquil, Ecuador, que dijo: “Esto es responsabilidad de todos: el que lo transporta, el que lo compra, el que lo consume. Todos comparten la responsabilidad.Han arruinado nuestro país”.
Según el informe, la mayoría de las redes de narcotráfico especializadas en cocaína actúan principalmente en Estados miembros de la Unión Europea, como Bélgica, Alemania, Italia, Países Bajos y España.
La presencia de importantes puertos en estos países, a menudo con conexiones directas con los países productores de droga, desempeña un papel fundamental en su protagonismo.
Según el informe, las redes de tráfico de drogas, y en particular de cocaína, son muy flexibles y operan utilizando diversos modus operandi a través de múltiples lugares.
Ocultan la droga en la estructura física de los contenedores, o la esconden en diversos tipos de mercancías legales.
Además, organizan transportes de droga desde varios puntos de partida a distintos puertos de llegada. Más allá de los viajes marítimos, también utilizan el transporte aéreo o por carretera para trasladar la droga.
De acuerdo al documento, el tráfico de cocaína representa 113 de las redes delictivas más peligrosas identificadas en Europa, la mayor de todos los tipos de tráfico de drogas.