El personal profesional y técnico del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), acompañado por los representantes de los gremios ATE y APINTA, elaboró un documento en el que rechazan, punto por punto, la avanzada oficialista sobre la Estación Experimental Agropecuaria Catamarca, más precisamente sobre el lote ubicado en Sumalao.
Se refieren puntualmente al proyecto presentado por el senador del peronista catamarqueño Dalmacio Mera, que ya obtuvo media sanción en esa Cámara y fue girado a Diputados. Con muy pocos fundamentos, dicha iniciativa propone que, ante el crecimiento del ejido urbano de San Fernando de Catamarca, el Estado provincial tome ese lote perteneciente al INTA y lo destine a “un centro tecnológico, educativo y de esparcimiento”.
“La Estación Experimental Catamarca del INTA está radicada en la localidad de Sumalao, departamento Valle Viejo, desde hace más de 60 años. Primero como Delegación del Ministerio de Agricultura de la Nación y luego como Vivero Nacional Oficial Olivícola, aportando al gran impulso que tuvo la olivicultura, a partir de Ley Nacional de 1930 cuyo punto cumbre fue el desarrollo de más de 80.000 hectáreas de olivo en todo el país”, indicaron quienes rechazan esta avanzada sobre los terrenos del organismo en un documento al que tuvo acceso Bichos de Campo.
Allí se expresa con claridad que “la Dirección de la EEA (Estación experimental) no acuerda con los términos y fundamentos expresados en el proyecto de Ley en cuestión, ya que nuestra Institución valora fuertemente la importancia de la interface urbano-rural en el crecimiento sustentable de la calidad de vida de las comunidades”.
Vayamos a los argumentos. Lo primero que se afirmó desde el oficialismo es que el terreno en cuestión está en una zona “de viviendas familiares y no resulta adecuado el funcionamiento de una agencia experimental rural”, y que por ello “ss conveniente diseñar políticas e instrumentar programas y proyectos destinados al planeamiento urbano y a la ejecución de obras públicas en ese preciado terreno.”
¿Qué respondió la gente del INTA? Que no se debe tratar la cuestión solamente desde el punto de vista del diseño de políticas de planeamiento urbano, “sino de gestionar un plan de ordenamiento territorial” que desde el gobierno provincial ya se vendría gestionando.
“El proyecto de ley presentado por el senador parece no contemplar o desconocer la integralidad de dicho plan, donde el INTA también tiene un rol activo. Este nuevo plan debería permitir congeniar la convivencia de espacios rurales y urbanos, desmotivar el hacinamiento, generar pulmones verdes y acercar la tecnología de la producción agropecuaria a todos los sectores”, sostuvieron.
A continuación, agregaron que “el INTA Catamarca ha desarrollado proyectos para el ambiente urbano-rural fomentando la convivencia de ambos sistemas en armonía, lo que significa que consideramos permanentemente los criterios ambiental, económico y social, y tenemos en cuenta las transformaciones territoriales relacionadas al avance de la urbanización”.
Este es el documento completo:
Agosto 2021- Documentos INTA EEA Catamarca . Rechazo proyecto Ley S-1104-20
En cuanto al segundo fundamento, el senador Mera sostuvo que los “criterios de sustentabilidad aconsejan desplazar del inmueble el funcionamiento de INTA y así diseñar una localidad, donde el vecino sea el principal beneficiario” con esos terrenos estatales.
La gente del INTA, que desde hace años realiza numerosos estudios para analizar la manera de transicionar hacia sistemas agropecuarios mas sustentables, indicó que “desde los instrumentos programáticos con los que se cuenta, se aborda el desarrollo de sistemas productivos para áreas de amortiguamiento e interfaces urbano-periurbano-rural, que promuevan el resguardo ambiental y la producción de calidad”.
En ese sentido, remarcaron que la experimental se encuentra en permanente contacto con productores y sus familias, contribuyendo al arraigo rural, a la equidad social y al agregado de valor en origen.
“Estamos convencidos que no solo la urbanización es la que genera innovación y creatividad. No debe desmerecerse ni desconocerse la importancia de la interface urbano-rural en el crecimiento sustentable de la calidad de vida. Por ello creemos que a la hora de implementarse el ordenamiento de los territorios se debe limitar el cambio de usos del suelo rurales a usos urbanos (pérdida irreparable de las tierras más fértiles y productivas para desarrollos inmobiliarios) y promover los asentamientos que optimicen las infraestructuras existentes, mejorar la conectividad, refuncionalizar espacios y ocupar vacíos urbanos”.
El documento incluyó también un racconto de los antecedentes vinculados a esa parcela ahora amenazada. Desde 1987 se realizan allí ensayos experimentales con frutales: uva primicia, poda corta de higueras, durazneros, ciruelos, almendros, nísperos y palmeras datileras. Además contó con un vivero forestal, en el que se trabajó hasta 1995.
Más cerca en el tiempo, el predio contó con plantas madres de olivo, que se mantuvieron hasta que iniciaron los problemas de abastecimiento de agua asociados al inicio de una obra aledaña.
“En suma a la falta de agua de riego, el capital humano del INTA Catamarca (a raíz del decrecimiento de la planta de personal por distintas políticas que llevaron a ello) y los recursos presupuestarios, destinados al mantenimiento de parcelas de investigación y experimentación, no han sido suficientes para dar continuidad a planes de trabajo que se mencionan en párrafos anteriores”, señalaron los trabajadores.
Frente a eso, desde 2008 a 2019 se presentaron múltiples propuestas para mitigar esa realidad, relacionadas principalmente a obras para riego.
¿Cómo concluye el documento que pide a los diputadosmrechazar este tintento de expropiación? Con el pedido del INTA EEA Catamarca de continuar con las acciones institucionales posibles que ayuden a resolver esa problemática, para “preservar las tierras agrícolas de la Institución e incorporar prácticas de agricultura urbana y periurbana, poniendo en valor las funciones ecosistémicas de estos espacios para las ciudades, y ofreciendo diferentes oportunidades para la conservación e integración de la biodiversidad en el contexto urbano-rural”.