La chicharrita hizo estragos. El insecto avanzó lote a lote de maíz y difundió en todos ellos un complejo de enfermedades que incluye la Spiroplasma. El primer resultado fue que se perdieron cerca de 11 millones de toneladas, por la estrepitosa caída de los rendimientos. Pero el segundo resultado puede ser más dañino todavía, ya que muchos productores y dueños de campos se asustaron tanto que piensan seriamente en excluir el maíz de sus rotaciones en la campaña 2024/25.
Matías Cardascia es ingeniero agrónomo y uno de los responsables de ventas de semillas en Syngenta, una empresa que pisa fuerte en maíz. Su actitud es muy valorable, porque en base a las reglas del márketing él debería minimizar esos temores y decir que no va a pasar nada, para cuidar las ventas de quienes le pagan el sueldo. Pero no lo hace y primero cuida su prestigio como profesional: dice que no existen “soluciones mágicas” contra la plaga, pero a la vez considera que la agronomía tiene herramientas para minimizar el impacto y evitar sufrir las mismas pérdidas el próximo año.
Mirá la entrevista completa:
-Este año la chicharrita asustó a todo el mundo. ¿Se nota eso en la demanda de semillas de maíz? ¿Notan una caída en Syngenta?
-Se nota. La realidad es que es un año extremadamente complejo, porque es un problema grande en el cultivo.
-¿Entonces ya están notando que los que querían sembrar maíz, están empezando a dudar?
-Lo estamos notando. A lo que queremos ayudar nosotros es ayudar a que los productores produzcan más y de manera más eficiente, ese es nuestro norte. Con lo cual debemos llevar información para que cada productor tome mejores decisiones. O sea, un productor del norte, que este año está bajando su área (de maíz) en un 20 o 30%, llevándola a girasol, por ahí en el norte de Santa Fe, o pasando a soja o sorgo en el NOA, creo que no es una mala decisión después de lo que está pasando.
-Pero es una macana como país, el maíz no debiera retroceder, como concepto general.
-Como concepto general, el maíz es el gran cultivo de nuestra industria, ¿no? ¿Por qué? Por un montón de puntos, por rendimiento, por lo que mueve en la cadena, en acopios, en transportes. El maíz es el cultivo más federal de la Argentina, se transforma generalmente donde se produce, el consumo interno está aumentando cada vez más, sabemos que la transformación en carne, en biocombustible y demás, es el cultivo estrella, por eso lo tenemos que cuidar.
-¿Y cómo hacemos?
-Uno ve en Brasil, donde el problema con el Spiroplasma no es nuevo, incluso es más grande que en Argentina en términos de amplitud y más antiguo. Sin embargo el área de maíz no para de crecer.
-¿Qué hicieron en Brasil que deberíamos aprender o mirar?=
-Conecto el qué hicieron con el qué nos trajo hasta acá, porque el entender qué nos trajo hasta acá nos permite ver qué es lo que tenemos que corregir de cara al futuro. ¿Qué nos trajo hasta acá? Nosotros estamos en la peor epifitia de los últimos 33 o 34 años. ¿Por qué estamos en la peor epifitia? Porque pasaron algunas cosas que no son normales. O sea, no es normal que nosotros no tengamos heladas en San Justo, en el centro norte de Santa Fe o en norte de Córdoba, si uno mira los registros históricos. Allí caen entre 5 y 15 heladas por año, pero el que pasó fue uno de los inviernos más cálidos de los que tenemos registro. ¿Qué pasa cuando los inviernos son cálidos? La chicharrita sobrevive y empezamos con poblaciones iniciales más altas. La chicharrita con la helada se muere.
-Y en 2023 casi no hubo heladas…
-Pero no solo eso. El no haber heladas afecta a que nosotros tengamos maíz en invierno y en primavera, porque el maíz guacho, o lo que queda de rezago de los lotes que no se cosecharon por la seca el año pasado, o las pérdidas de cosecha por la cola de la cosechadora, nos queda que ese maíz siga naciendo en camada. El productor venía acostumbrado que el invierno hacía su trabajo en esa región, entonces no controlaba, no lo hacía con control químico. Entonces, no solo que arrancamos con una población más alta de chicharrita sino que la chicharrita empieza a ciclar bien temprano en primavera y llegamos…
-Tiene donde esconderse, donde aguantar. Ya no aguanta ni la helada y además tiene una casa cómoda.
-Correcto, y se alimenta y se reproduce solo en el cultivo de maíz. Entonces si tuviste maíz desde más temprano, la chicharrita empezó a ciclar antes. Con lo cual llegás a noviembre, diciembre, las fechas de siembra tardía, con una población muy alta de chicharrita. Eso fue lo que nos trajo hasta acá. ¿Y qupe nos hace pensar que esto se va a repetir? Creo que lo errático de las condiciones que nos trajeron hasta acá, a uno le haría pensar que la probabilidad de ocurrencia de un epifite a esta magnitud es baja. Por eso creo que un productor, a la hora de encarar un manejo, ¿arma un escenario de que esto se va a repetir tal cual el año pasado? ¿O arma un escenario donde el Spiroplasma no se repite nunca más? ¿O debe apuntar al medio?
-Es posible que una helada liquide todo el problema y estuvimos todos aterrorizados por algo que no va a suceder…
-Correcto. Por eso creo que lo más lógico es tratar de tomar decisiones moderadas, aunque lo emocional ordene “me quiero olvidar del maíz por un año”. Creo que hay que ir a lo racional, a analizar la información que tenemos y a tomar mejores decisiones.
-Cuando decimos manejo intermedio, ¿qué cosas hay para hacer?
-Lo peor que podemos hacer es hablar de Spiroplasma como si toda la Argentina fuera igual. Son tres grandes zonas: la zona núcleo, la zona de transición y la zona norte. La zona núcleo que siga haciendo maíz como venía hasta ahora. ¿Por qué? Si en la peor epifiria solamente se afectaron los lotes sembrados en enero, que no son más del 3 o 4%, me parece que no sería lógico tomar decisiones por Spiroplasma. La zona núcleo tiene que sembrar en función de si está el perfil cargado, qué dan los márgenes, qué tipo mix hago entre temprana y tardía.
-Estoy en el norte… ¿Qué hago?
-Si estoy en el norte, realmente, la plaga tenía 5 o 10% de incidencia en la mayoría de los lotes en el norte argentino. Este año fue algo atípico. ¿Qué hago? Bueno, busco manejos que con genética. Busco mixear un poco más con maíces tropicales. No digo irse todo a tropicales, porque los tropicales no tienen ni el potencial de los templados y tienen quilombos agronómicos más grandes. ¿Y los tropicales por qué? Porque han mostrado mejores resistencias en Brasil.
-¿Entonces hay semillas que ofrecen mejor resistencia?
-Resistencia no hay ni va a haber, va a haber niveles de tolerancia. La genética tropical, como esta es una enfermedad que nace en el trópico, que nace en México con el cultivo de maíz, la genética tropical tiene algunos genes de tolerancia que mejoran la efectividad frente a esta enfermedad. Entonces, la gran respuesta está en los tropicales. Obvio que hay algunos templados que funcionan mejor que otros, pero la respuesta más significativa la vamos a ver entre los tropicales y los templados. Por eso decimos que usar algo más de genética tropical en el norte argentino puede ayudar. Los tropicales se deben manejar con menos densidades y utilizar con más humedad, porque si lo queremos utilizar con 13 o 14%, como estamos acostumbrados con los templados, vamos a tener severos problemas de pérdida de rendimiento por quebrado. Entonces, manejo de tropicales como tropicales, usando los tropicales en el cierre de siembras del norte.
-¿Con eso alcanza?
-Lo que dijimos, manejá bien los barbechos, tratá de hacer control de guachos, tratemos de aglutinar más la fecha de siembra, porque si nosotros sembramos escalonado, como pasó este año en San Justo, nos va a pasar que le estamos dando chance a la chicharrita que se empieza a reproducir más anticipadamente y llegar con poblaciones más altas a diciembre.
-No sé si lo había pensado o no, pero en el medio de todo esto Matías dijo que no iba a haber ninguna solución milagrosa, que lo que hace falta es mucho laburo, mucho seso… ¿Hay que intentar permanecer en el maíz, pero con mucha profesionalización del cultivo?
-Correcto, creo que los riegos los tienen todos los cultivos, hoy podemos hablar de los riegos de la soja, del sorgo, del maíz, del girasol, todos los cultivos son riesgosos, con lo cual hay que medir el perfil de riesgo que quiero tomar y cuáles son los agentes o factores o datos que me pueden ayudar para entender cuál es ese riesgo. No hay soluciones mágicas. Esto es llamado a la acción porque es mejor hacer que decir, creo que tenemos que trabajar como nunca, como equipo, monitoreando lo que pasa con la plaga, haciendo el control de guachos y eligiendo esquemas productivos sin dejar afuera el maíz. Y lo hablo no como vendedor.
-Eso es lo que me asombra: vos tenés que vender.
-Más allá del vendedor, en Syngenta también somos productores. Nosotros producimos semillas de maíz todos los años, con lo cual si no confiaríamos un poco en este diagnóstico que te estoy haciendo, no nos largaríamos a hacer la producción de semillas de maíz. Imagínate con un hibrido susceptible, en la línea más. Hablamos de tratar de entender esta problemática de la manera más profesional posible para ayudar a nuestro cliente a tomar mejores decisiones.