Esta semana los administradores de fondos agrícolas que negocian futuros y opciones en el CME Group (Chicago) volvieron a liquidar posiciones “compradas” tanto en maíz como en soja para potenciar el efecto bajista promovido por un contexto global por demás turbulento.
Los fundamentos intrínsecos del mercado son alcistas con una oferta que difícilmente pueda alcanzar las necesidades de la demanda, dado que Ucrania sigue “fuera de juego” y Sudamérica, además de los problemas económicos presentes en la Argentina, enfrenta un panorama complejo ante una eventual tercera fase Niña consecutiva.
Sin embargo, los temores de una recesión de orden global junto con el advenimiento de una nueva “guerra comercial” entre China y EE.UU., provocaron esa semana ventas masivas de futuros de commodities que golpearon con fuerza a los valores de los principales productos agroindustriales.
En ese marco, los administradores de fondos especulativos (“hedge funds”), que buscan obtener diferencias al adelantarse a las tendencias del mercado agrícola, no tienen otra alternativa que liquidar posiciones para acompañar al mercado, porque, de lo contrario, corren el riesgo de maximizar pérdidas.
La cuestión es que, cuánto mayor sea la posición “comprada” o alcista en un producto en particular, mayor es la necesidad de liquidar posiciones y, por lo tanto, mayor es el efecto “potenciador” del fenómeno bajista.
Al martes 21 de junio –según los últimos datos publicados este viernes por la Commodity Futures Trading Commission– los administradores de fondos de inversión agrícolas acumulaban una posición neta de 347.666 contratos de maíz del CME Group (futuros + opciones) versus 365.557 una semana antes. En el caso de la soja, las posiciones netas al martes pasado sumaban 153.447 contratos contra 165.678 una semana atrás. Las operaciones se difunden con algunos días de retraso para evitar que tal información impacte en las cotizaciones de granos.
Las posiciones netas surgen de la diferencia entre las posiciones compradas (“long”, que fijan un precio techo y por ende apuestan a un mercado alcista) y las posiciones vendidas (“short”, que fijan un precio piso y por lo tanto apuestan a un mercado bajista.