Claudio Giusti es un productor ell Valle de Uco, uno de los oasis de Mendoza, de donde sale el mejor malbec de la Argentina, el que más demanda el mundo. Tiene 14 hectáreas, de las cuales 5 son de viñedos y el resto de otros frutales, como duraznos, ciruelas y nogales. Para gente como Giusti, la vendimia debiera ser una fiesta, pero hace rato que no es así.
“No te da gozo, porque es ahí cuando empiezan todos los problemas, como el de encontrar gente para trabajar, o que los rendimientos no sean los que se esperaban”, relató el viñatero a Bichos de Campo. Pero luego mencionó que el principal motivo para no disfrutar de la vendimia es la incertidumbre: el productor cosecha sin saber si con lo que gane va a cubrir sus costos.
El tiempo entre que Giusti cosecha las uvas trabajadas durante todo un año y aquel en que tiene que entregarlas debe ser instantáneo. “Nosotros ya tenemos una bodega seleccionada a la que entregamos la uva. El tema es que venimos hace 2 o 3 años con que las bodegas quieren recibir menos uva, justo acá, teniendo el mejor malbec del mundo en el Valle de Uco”, manifestó.
Mirá la entrevista completa realizada a Claudio Giusti:
Según Giusti, el “poco interés” de las bodegas por las uvas se basa en que bajó el consumo nacional del vino. “Con eso explican que no pueden mejorar el precio de la uva desde hace tres años. Trabajamos con el mismo precio de hace tres años y con una inflación del 50% anual”.
En el caso de Giusti, su parral tiene 5 años de vida y ya va por su tercera cosecha. Sobre el cierre de la vendimia 2020, el productor aseguró que “estamos frente a una de las mejores cosechas y en el punto óptimo de rendimiento, pero todavía no sabemos qué precio percibiremos, ya que estamos llevando la uva a la bodega que elabora el vino, y es desde allí de donde sale el precio”.
“Encima ese precio te lo van dividiendo en los meses del año, o sea que cobraremos la uva de esta cosecha en cuotas, y recién dentro de un año, con la próxima cosecha, y sin actualización de precio”.
Un informe de la Sociedad Rural del Valle de Uco, en este sentido, indicó el pago por la uva previsto para dentro de tres meses está rondando los 20 pesos el kilo de la variedad Malbec. Las cuentas pintan muy mal, pues una hectárea tipo en el Valle de Uco con un rendimiento de 80 quintales a un precio de 20 pesos el kilo de uva, va a dejar para el productor 160.000 pesos cobrados en tres meses.
“Con la inflación actual eso no es nada, por lo cual no podrá saltar la diferencia entre el costo de volver a empezar, la devaluación que existe por la brecha cambiaria que hoy tenemos y hoy se compra a un dólar de 100 pesos y se vende a 20 pesos el kilo de uva. De esta forma el quebranto está asegurado”, afirmó la entidad.
Para Giusti, es una locura cómo está planteado enl negocio del vino, donde los eslabones más débiles de la cadena terminan financiando a los más fuertes. “Siempre la variable de ajuste es el productor que es el más chico de la cadena. Nosotros hasta financiamos a las bodegas. Para que tengas una idea, nos han estado pagando la uva con los intereses de los plazos fijos. O sea que les convenía especular con ese dinero para luego pagarte a vos la uva”, se lamentó.
Como solución a esta problemática, Giusti explicó que “se intentó tener un mercado de uva y fijar un precio de referencia, y ese número es el de aproximadamente 50 centavos de dólar para el kilo de vino. Nos manejamos en precio dólar porque todos nuestros insumos están expresados en dólares, pero los precios que recibimos son en pesos”, explicó.
Pero acá otra vez el problema. El valor de referencia del kilo de uva que se necesita para hacer una actividad rentable será este año un ideal al que posiblemente no se llegue. “Si las bodegas quisieran, podrían pagar ese valor; por el precio que va a exportación, te aseguro que se puede hacer”, expresó Giusti.
Con los valores actuales, el productor mendocino dice: “Hoy en día vivimos pero no podemos reinvertir en el monte. Si queremos hacer una mejora no existen créditos, porque los que hay con tasas del 45% a 50% no es viable el negocio. Nos encantaría hacer riego por goteo porque tenemos rindes indeseados por falta de agua, un escenario que dicen que será cada vez más normal. Entonces tenes que quedarte quiero y esperar a que esto mejore”.