Como era de esperarse, la resolución 170/2021 publicada por el Instituto Nacional de yerba Mate (INYM), que limita la plantación de nuevos yerbales, produjo una fuerte polémica en el sector. Para empezar, se conoció el rechazo del Ministerio de Producción de Corrientes, la segunda provincia productora detrás de Misiones, que consideró a la medida como apresurada.
“En los considerandos reconocen que dos días antes recibieron una nota de una serie de entidades de productores solicitando esta medida, y en 48 horas y con pocos fundamentos tomaron la decisión. Según el decreto reglamentario 1240, en sus artículos 8 y 9, este tipo de medida debe tomarse junto a la Secretaría de Agricultura. Jorge Solmi, secretario de Agricultura, estuvo reunido conmigo y me dijo que no había sido consultado”, comentó a Bichos de Campo Claudio Anselmo, el ministro de Producción de Corrientes.
Habiendo sido durante varios años director del INYM por la industria, ya que trabajó como ejecutivo en el Establecimiento Las Marías, la productora de Taraguí, Anselmo aseguró que entiende la preocupación de los pequeños productores por el crecimiento de los yerbales en manos de grandes empresas. Pero también observó que las regulaciones “tienen que ser razonables y entendidas en un contexto general”.
Según indicó el ahora ministro, hace cuatros años el país atraviesa una situación de sub oferta de yerba matea que llevó a que el año pasado se importaran 31.000 toneladas de yerba canchada desde Paraguay y Brasil, para sostener el nivel de elaboración de la industria nacional.
En el caso particular de Corrientes, la provincia cuenta con 23.000 hectáreas cultivadas reconocidas ante el INYM, contra unas 154 mil de Misiones. En los yerbales correntinos se obtienen entre 35.000 y 40.000 toneladas de yerba mate canchada al año. En el 2020 la industria instalada correntina llego a las 100.000 toneladas procesadas a causa únicamente de una integración histórica con Misiones.
“En materia prima tenemos mucha menos producción de la que requerimos. Nuestras empresas industriales instaladas en Corrientes adquieren más de la mitad de su abastecimiento de Misiones, con proveedores de muy larga duración. Al tomar esta decisión eso no se ha tenido en cuenta. Inclusive uno de los considerandos cita a la Constitución de Misiones que respetamos mucho pero no nos corresponde”, explicó Anselmo.
Teniendo en cuenta que el sector ha realizado numerosos esfuerzos para desarrollar los mercados externos como Estados Unidos, España, Francia, China e India; y sostener a otros fijos como Siria y Chile, Corrientes teme no poder abastecerlos si se impide que la producción crezca.
“El objetivo no es generar una sobreproducción y una sobreoferta, porque eso conspira contra la actividad. En la mesa yerbatera se plantearon programas de incremento de la superficie implantada pero un criterio muy razonable. Estamos siempre dispuestos a ir a discutir y a buscar las mejoras alternativas pero no de esta manera”, sostuvo el ministro.
-¿Por qué cree que logro aprobare ahora?- le preguntamos.
-Por una simple cuestión de mayoría en el directorio del INYM, nada más.
-¿Considera que hay chance de revertir la resolución?
-Creo que sí. Tienen que entender que las cosas no se deben hacer por imposición. Hay argumentos legales que creemos que están equivocados.