En pocos días más se conocerá finalmente la propuesta que la familia Navilli realizará a los acreedores que integran los concursos preventivos de Molino Cañuelas (Molca) y Compañía Argentina de Granos (Cagsa).
La primera fecha clave es el próximo 20 de febrero con la realización de una audiencia de seguimiento y evaluación de las alternativas de propuestas de acuerdo. La cita presencial es las 11:00 horas en la sala de audiencias del Nuevo Edificio de Tribunales Balcarce esq. Corrientes, segundo piso, ala penal (Río Cuarto, Córdoba).
A los fines de una mejor organización, el juzgado en lo Civil y Comercial de 6° Nominación de Río Cuarto sugirió que los interesados en concurrir se inscriban previamente en la siguiente dirección de correo electrónico: oficinaconcursosjuz6-rc@justiciacordoba.gob.ar
El 22 de marzo próximo se realizará una nueva reunión, pero esta vez en formato virtual, para lo cual también será necesario inscribirse con anterioridad vía correo electrónico.
La siguiente instancia es una audiencia informativa sobre la propuesta concursal, que se llevará a cabo el 5 de abril 2024 a las 11:00 horas en la sede del Tribunal, bajo la modalidad presencial o vía remota (por definir).
La fecha de vencimiento del período de exclusividad quedó determinada para el 12 de abril próximo, lo que implica que, para entonces, la familia Navilli tendría que lograr que su propuesta sea aceptada por las mayorías concursales necesarias.
Como la mayor parte del pasivo concursal –que supera los 1300 millones de dólares– está en manos de entidades financieras y corporaciones agroindustriales, la estrategia de negociación está enfocada en ambos rubros. En los primeros puestos del ranking de deudores también aparece la AFIP, Cammesa y agencias tributarias provinciales.
Si bien Molca denunció como fecha de inicio del estado de cesación de pagos el día 31 de agosto de 2021 –día en el cual el directorio de la empresa resolvió la presentación en concurso– lo cierto es que la compañía había dejado de abonar obligaciones financieras desde julio de 2018 con el propósito de renegociar vencimientos en el marco de un acuerdo extrajudicial (estrategia que, obviamente, fracasó). Gracias a eso, no son muchos los acreedores granarios que conforman el concurso porque, alertados por el estado financieros de la compañía, habían dejado de venderle y entregarle granos con mucha anticipación.