Tres de febrero: A través de un comunicado oficial, el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Fernando Vilella, anunció que el ingeniero agrónomo Daniel Notta sería el nuevo nombre al frente del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM). Para ese organismo mixto, además, el nuevo gobierno de Javier MIlei había planteado en el DNU un recorte de las funciones originales planteadas en la ley de creación de 2002.
La noticia de la designación de Notta no generó en aquella oportunidad demasiada sorpresa, ya que desde fines de 2023 el nombre de ese agrónomo ligado al ex gobernador misionero Ramón Puerta, que se desempeñó además como el primer presidente de ese organismo, retumbaba por los pasillos. A eso había que sumar su propia trayectoria como productor de yerba con más de 30 años de actividad, lo que lo llevó también a participar de la elaboración de la Ley 25.564 que le dio origen al INYM.
Cinco de febrero: A la espera de la designación oficial en el Boletín Oficial, representantes del gobierno de Misiones y de los propios productores representados en el Instituto salieron a mostrar su descontento con la elección de Notta como nuevo titular del organismo yerbatero, que entre sus funciones tiene la de fijar precios de referencia semestralmente. Vale recordar que Puerta, un hombre ligado históricamente al macrismo, es uno de los grandes productores de yerba.
“La provincia de Misiones no avala la designación. Tenemos una mirada muy distinta de la economía yerbatera y en particular de la familia productora. Más que un tema de nombres, nosotros abogamos por la prosperidad de todos los productores y un buen precio de la materia prima para que se revierta la pirámide donde ganan dos o tres a expensas del resto”, sentenció en sus redes Facundo López Sartori, ministro del Agro y la Producción de la provincia, dsautorizando directamente a Vilella.
En aquella oportunidad, medios locales indicaron que el principal punto de objeción tenía que ver con los antecedentes de Notta, que supo desempeñarse como ejecutivo de la yerbatera de la familia Puerta y fue integrante de la Comisión Reguladora de la Yerba Mate (CRYM) previa a la creación del INYM.
En paralelo, los reclamos por el precio de la yerba comenzaban a multiplicarse. Y también las dudas sobre el futuro del INYM. El DNU que plantea un claro recorte del poder de intervención de ese organismo recién comenzaba a ser discutido en el Congreso. El Senado lo voltearía hace un par de semanas, pero mientras no lo haga Diputados seguirá en vigencia.
Ocho de febrero: Luego de conocerse que el secretario de Industria y Desarrollo Productivo de la Nación, Juan Alberto Pazo, había tomado con la bendición del ministro Luis Caputo el control administrativo y financiero de la Secretaría de Agricultura que conduce Vilella, los rumores de una interna entre el ex decano de la Fauba y sus superiores se reforzaron.
El punto culmine de este división fue el viaje que el propio Pazo realizó a Misiones, donde se reunión con las distintas áreas del INYM, en busca de pilotear en persona la crisis desatada por la designación propuesta por Vilella para ese organismo.
El panorama se agravó aún más cuando una gacetilla oficial dictada por ese propio Instituto dio cuenta de que Pazo puso en duda la designación de Notta por parte de Vilella. Como sea, el nombramiento quedó en duda.
Veintidós de marzo: pasó un mes y medio desde aquella comunicación y por ahora sigue sin conocerse quién será el nuevo titular del Instituto encargado de regular el precio de la yerba mate, entre otras funciones regulatorias. Tampoco se sabe cómo ejecutará el gobierno nacional (sea Pazo o Vilella el responsable) las directrices del DNU, que obligan a quitarle poder de fuero al INYM.
Consultado por Bichos de Campo, el hombre designado por el directorio como el responsable del Instituto, Jonás Petterson, dijo: “La designación de Notta no apareció nunca y por ahora desconocemos en qué situación se encuentra eso hoy. No sabemos si habrá alguna postulación porque esa decisión la toma Agricultura. No tenemos mayor información”.
Otras fuentes confirman que por ahora nadie tiene noticias sobre quién será el nuevo presidente del INYM?
Tampoco se sabe qué pasará ese Instituto cuando, como define la ley de su creación, deban comenzar a reunirse los directivos de los diferentes sectores, para definir el precio de referencia de la hoja verde que todos los años se deben fijar en abril y octubre. ¿Se cumplirá con la ley? ¿O se aplicará de factor el DNU de Milei y no habrá un precio de referencia para la materia prima que entregan los pequeños productores?
En las últimas horas, el medio Misiones On Line informó que “el INYM no consiguió reunirse ni para pedir un laudo y después de 20 años el mercado yerbatero quedará desregulado”. Desde este punto de vista, la sensación es que “el Instituto se limitará a publicar una grilla de costos que oficiará como sugerencia para las operaciones”.
Si así fuera, la actividad yerbatera no tendrá precios oficiales por primera vez en más de dos décadas.
“Lastimosamente la sesión de precios se convocó tres veces consecutivas y el sector industrial estratégicamente decidió no presentarse nunca. Por ende, no hemos podido abrir nunca la negociación de precio y esto impide que nosotros podamos elevar el pedido de laudo a Nación”, explicó el propio Petterson a ese medio misionero.
La Ley prevé que, cuando en sus reuniones semestrales el directorio del INYM no llega a un acuerdo sobre un precio de referencia, debe ser el secretario de Agricultura quien establezca ese valor mínimo para la hoja verde y al yerba canchada. Pero ese funcionario nacional casi no tiene injerencia, y no ha podido ni siquiera designar al presidente del Instituto. Vilella parece estar pintado en esta discusión. Y Pazo no volvió a aparecer.
“La parte del directorio del INYM que representa a la producción y a Misiones, convocó tres veces a una sesión de precios, pero representantes de las industrias y Corrientes decidieron no presentarse, algunos amparándose en el DNU del Gobierno de Milei y otros justificando que estas negociaciones no eran ‘validas’ porque el Instituto no tenía un presidente definitivo”, explica Misiones On Line sobre este desaguisado.
Todo sucede cuando la voz orientadora del INYM parece ser más necesaria que nunca, porque hay inflación de costos todos los días (en especial desde la devaluación de diciembre pasado), el precio de referencia quedó claramente desactualizado y además la cosecha de verano está siendo muy voluminosa, lo que deprime los valores pagados al pequeño colono.
Según datos del propio INYM en enero del 2024 se cosecharon 21.069.927 kilos de hoja verde, y esto es nada menos que 121% más que en el mismo mes un año atrás, cuando arreciaba la sequía.
Se les acabo la joda, quieren seguir cazando en el zoologico prohibiendo nuevas plantaciones.
Le hicieron la campaña y votaron al loco que los cago como a todos, ahora van a pedir de rodillas que vuelva el peronismo.
Los directivos de este “instituto”estuvieron voviendo como reyes y viajando por el mundo mas de 20 años con la plata que les robaban a los consumidores.
Porque no les permiten a los productores plantar todo lo que desean y exportar el exedente? Simple, quieren seguir vendiendo poco y caro, a precio dolar blue en el mercado interno.