De acuerdo con información provista por el INTA, durante los primeros días del mes de septiembre se presentarían condiciones atmosféricas propicias para el desarrollo de lluvias y tormentas en amplias zonas productivas del centro y el litoral del país.
“Esta situación es muy beneficiosa porque permite una temprana recarga del agua el suelo para los lotes destinados a cultivos de gruesa y para las necesidades de trigos macollados. Que se proyecte una campaña con mejor regularidad en las lluvias es muy bueno para la planificación agropecuaria y la rotación de cultivos”, indicó Pablo Mercuri, director del Centro de Investigación de Recursos Naturales (CIRN) del INTA.
“Estas lluvias ayudarían a recomponer el agua en zonas que aún no salieron de la situación deficitaria, luego de los casi 4 años de sequía, como el oeste y noroeste de Buenos Aires, amplias áreas de Córdoba, La Pampa, sur y norte de Santa Fe, el litoral mesopotámico y provincias del norte del país”, afirmó a continuación.
De acuerdo al informe elaborado por el Instituto de Clima y Agua, durante los próximos seis días se registrarían lluvias y tormentas de variada intensidad sobre el NEA, Buenos Aires (norte y este), Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero y Tucumán. Según se indicó, algunas de ellas podrían ser muy intensas con abundante caída de agua, ráfagas y ocasional caída de granizo, especialmente sobre las provincias del NEA.
A su vez, se prevén lluvias y nevadas de variada intensidad sobre zonas cordilleranas de la Patagonia y de Mendoza. De este modo, las precipitaciones serían superiores a lo normal en el NEA, el NOA (sur), Buenos Aires (centro) y la Patagonia (oeste).
Hacia el 5 de septiembre, el pronóstico indicaría lluvias y tormentas de variada intensidad sobre el NEA, Cuyo (sur) y región Pampeana (oeste y sur). Habría lluvias y nevadas de variada intensidad sobre la mayor parte de la Patagonia, especialmente sobre zonas cordilleranas. De esta manera, las precipitaciones pronosticadas resultarían superiores a las normales sobre el NEA, áreas de Cuyo y de la Patagonia.
La campaña gruesa estará marcada por El Niño y otros forzantes oceánicos que proyectan una tendencia de lluvias normales o superiores a lo normal, en especial avanzada la primavera y durante el inicio del verano.
“Según la actualización de los modelos internacionales, a partir de este trimestre, las perspectivas de precipitaciones entre normales a superiores a las normales tienden a aumentar a partir de este trimestre en particular sobre las áreas agrícolas del centro y este del país”, detallaron desde INTA.
En este sentido, Mercuri recomendó “conocer y evaluar el agua disponible en el suelo en diferentes ambientes en los lotes agrícolas, no solo en el horizonte superficial, sino también en profundidad, sobre todo para las decisiones de siembras temprana”.
“Es muy importante toda practica de conservación de agua en el suelo, recarga y almacenamiento de agua para aguadas para ganadería”, sostuvo.