“Hemos calculado que en algunas ciudades la industria del biodiésel empezó a representar el 25% y hasta el 35% del Producto Bruto (PIB), lo que realmente implica desarrollo y empleo de alta calidad para las mismas”.
Así lo indicó Julio Cesar Minelli, director de la Associação dos Produtores de Biocombustíveis do Brasil (Aprobio), una de las tres entidades que nuclean a los productores de biodiésel de ese país, durante una charla ofrecida en el evento “Biocombustibles para la descarbonización del transporte” realizado ayer jueves en la ciudad de Foz de Iguazú y organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), la Unión de Azucareros Latinoamericanos (Unala) y la Coalición Panamericana de Biocombustibles Líquidos.
Brasil cuenta con 58 fábricas de biodiésel que en conjunto tienen una capacidad de producción de 14.660 millones de litros y emplean de manera directa a unas 17.000 personas.
“Tuvimos a nivel nacional un consumo de biodiesel en 2023 de 7340 millones de litros, pronosticamos cerca de 9000 millones de litros para 2024 y seguimos evolucionando”, destacó Minelli.
En el caso del biodiésel, la legislación brasileña contempla una mezcla obligatoria con gasoil fósil del 14%. La mayor parte del biocombustible se elabora en base a aceite de soja, pero también se emplea grasa animal y aceite usado de cocina.
Sin embargo, el próximo 8 de octubre será promulgada la “Ley del Combustible del Futuro”, la cual establece un aumento progresivo del corte obligatorio para llegar a un 20% en 2030.
“Con una mezcla obligatoria del 20% para 2030, deberíamos estar produciendo entre 15.000 a 16.000 millones de litros de biodiésel para esa época”, señaló el director de Aprobio en referencia a la demanda proyectada del biocombustible.
“La mezcla obligatoria de biodiésel con gasoil lleva ya 16 años y el funcionamiento de la política pública es importante para brindar sostenibilidad y previsibilidad a las inversiones realizada en el sector”, afirmó.
“En estas políticas estamos un poco más avanzadas que otros países de América latina, pero esperamos que podamos servir de ejemplo y apoyar a otras naciones para que implementen políticas en el mismo sentido, porque así seremos más fuertes todos”, resumió.