Luego de más de 24 horas de negociaciones forzadas por la renuncia de Martín Guzmán al Ministerio de Economía, en las que se especuló con una gran reorganización de gobierno capitaneada por Sergio Massa, uno de los tres socios de la coalición oficialista, finalmente pareció frustrarse todo y el gobierno anunció esta noche la nominación de la modesta economista Silvina Batakis para ese puesto. De ella la bibliografía dirá que fue titular de esa misma cartera en el gobierno bonaerense de Daniel Scioli entre 2011 y 2015. Pero la verdad es que es una militante de Cristina Fernández de Kirchner. “Un soldado”, la definen.
De hecho, Batakis ocupaba hasta ahora un cargo en el Ministerio del Interior, junto a Eduardo Wado de Pedro, el principal comisario del kirchnerismo en el gobierno de Alberto Fernández.
La designación de esta gris economista fue informada a los medios tras una larga jornada atravesada por llamados y encuentros que se aceleraron este domingo y que tuvo un momento clave en un diálogo telefónico mantenido esta noche por el Jefe de Estado y la vicepresidenta Cristina. Luego, el presidente se fue a descansar por recomendación de los médicos.
Durante todo el día se especuló con una salida distinta a esta crisis, que era la designación de Sergio Massa, actualmente en Diputados, como jefe de Gabinete o ministro “plenipotenciario” de Economía. Todo quedó en nada, por lo menos por ahora. La designación de Batakis, anunciada a última hora, dejó desdibujada toda la negociación, aunque algunas fuentes oficiales decían que la reorganización del gobierno continuaría durante toda esta semana.
Como bien enfocó Bichos de Campo al conocerse la noticia de la renuncia de Guzmán, para el sector agropecuario significaba la salida de una “paloma” del gobierno, es decir de un funcionario que prefería no confrontar de lleno con el campo ni aplicar las recetas exageradas reclamadas por el “ala dura” del kirchnerismo. Con esa misma lógica podríamos titular que la llegada de Batakis responde al interés de los “halcones”.
En realidad, poco contacto ha tenido Batakis con la agenda diaria del agro. Se la recuerda entre los dirigentes rurales por haber sido quien aplicó un duro tarifazo al impuesto inmobiliario rural bonaerense, que incluso provocó una movilización de productores hacia la ciudad de La Plata.
Veremos cómo sigue. Por ahora parece que Cristina impuso un nombre propio para un cargo que consideraba ajeno, aunque a Guzmán también lo habría propuesto ella, pero comenzó a esmerilarlo al poco tiempo, cuando mostró señales de autonomía propia.
La opción a una reorganización total del gobierno (en la que incluso se hablaba de un alejamiento del ministro de Agricultura, Julián Domínguez) parece que no marcha por ahora. Sin ese gran acuerdo, Batakis luce por ahora como la “Remes Lenicov” de la hora, quizás no por convicción, pero sí por imposición. Cristina la mandó a dar un paso adelante, parada justo delante de un precipicio.
Alberto, mientras tanto, es apenas una sombra de la sombra que siempre fue. En 2015, la Revista Chacra publicaba un breve perfil de la ex ministra bonaerense, ahora ministra nacional de Economía. “Activa en las redes sociales, se presenta a sí misma como ‘federal y peronista’. Nació en Río Grande y repartió su vida entre Gallegos, Rafaela, Taco Pozo y La Plata. Hincha fanática de Boca, Batakis es egresada de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata. Se diplomó con un máster en Finanzas públicas provinciales y uno en Economía ambiental de la Universidad de York, Reino Unido. Obtuvo diversas becas en el exterior. Se capacitó en Francia, Inglaterra y Chile”.
Muchas gracias por el gran artículo. Saludos