Según los registros de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la producción de soja de la campaña 2029/20 cerró con una baja de 10% respecto de la cosecha anterior. Fue de 49,6 millones de toneladas.
La merma del 10% en la producción se produjo por una caída en el rinde promedio nacional producto del déficit hídrico que afectó al cultivo en plena etapa crítica, precisó la entidad.
De todos modos, hay un proceso más de fondo: la superficie dedicada a la oleaginosa estrella del agro argentino está lejos de ser la que supo ser. Con el fin de la trilla el dato final de superficie fue de 16,8 millones de hectáreas. En algún momento, el área sojera llegó a 20 millones de hectáreas.
🆕#EstadoYCondición al 18-06-20: Finalizó la cosecha de soja.
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“El volumen de producción estimado para la presente campaña es de 49,6 millones de toneladas, posicionándose como la séptima mejor campaña de los últimos 20 años”, resume el trabajo. De allí el chiste del título: tanta pelea por Vicentin, una aceitera con gran capacidad de molienda de soja, mientras la oferta de la materia prima está estancada y hasta en declive respecto del récord de 61 millones de toneladas logrado varias campañas atrás.
De acuerdo con el balance del equipo de estimaciones dela Bolsa de Cereales, el rinde final de esta campaña fue de 29,4 quintales por hectárea, 12,1% menos que en el ciclo previo y 1,4% por debajo del promedio de las últimas cinco campañas.
“Si bien restan algunos lotes por cosechar en el sur de la provincia de Buenos Aires, la superficie remanente no es significativa y ello permite dar por concluida la campaña. Durante el presente ciclo se estima que el 68 % del área
cosechada fue aportada por lotes de primera, que finalizaron con un rinde promedio de 32 quintales por hectárea”, indicó el informe de fin de ciclo. Aquí están los peores daños, ya que en el ciclo previo ese promedio se había ubicado en 36,2 quintales.
El otro 32 % del área cosechada corresponde a lotes de segunda, que finalizaron el ciclo con un rinde promedio de 23,9 qq/Ha. Este rinde refleja una caída interanual de 3,4 quintales, pero se ubica 1,5 quintales por encima al promedio de las cinco campañas previas.
A escala regional, los mejores rendimientos se ubicaron sobre el centro de la región agrícola, más precisamente en las regiones Núcleo Norte, Núcleo Sur y Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires. Estas mismas regiones son las que alcanzaron los mayores volúmenes de producción, no solo por los rindes cosechados sino también por su gran participación en área sembrada.