Argentina autorizó la comercialización de la semilla y los productos derivados de la misma provenientes de la soja BCS-GM151-6, la cual presenta protección frente al ataque del nematodo del quiste de la soja (Heterodera glycines) y tolerancia a herbicidas inhibidores de HPPD.
El evento, desarrollado por BASF, no puede ser cultivado en la Argentina hasta tanto no sea autorizado por China, dado que esa nación es la mayor importadora del poroto argentino.
La disposición 8/2024 de la Subsecretaría de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional, publicada este miércoles en el Boletín Oficial, dispone que “en forma previa a la inscripción en el Registro Nacional de Cultivares del Instituto Nacional de Semillas” BASF “deberá cumplir con la presentación del plan de manejo de resistencia de nematodes”.
El evento BCS-GM151-6 confiere protección frente al ataque del nemátodo del quiste de la soja otorgada por el producto de expresión del gen cry14Ab-1.b y tolerancia a herbicidas inhibidores de HPPD a partir del gen hppdPf-4Pa.
El evento BCS-GM151-6 fue aprobado en Brasil en 2021 para comercialización y uso interno (no para cultivo), mientras que ese mismo año Paraguay lo autorizó para cultivo (vale recordar que ese país tiene vedado el acceso al mercado de China al reconocer a Taiwán como nación independiente).
Los nemátodos del quiste de la soja pueden provocar reducción de rendimientos sin manifestar síntomas en la parte aérea de la planta, especialmente cuando las condiciones de humedad del suelo son óptimas.
Se denomina “nemátodo del quiste” ya que la hembra al morir toma el aspecto de un quiste endurecido que permanece en el suelo, como forma de resistencia, protegiendo los huevos y tornándolos viables durante muchos años. Dentro de los huevos se encuentran las larvas con el primer estadio completo.
El estadio infectivo de este nemátodo corresponde al de la larva del segundo estadio, la que luego de emerger del huevo penetra en las raíces de la soja. La forma juvenil de la hembra queda inmovilizada en el sitio de alimentación y toma una forma globosa. Al finalizar el estadio adulto, la hembra se transforma en una bolsa de huevos, formando el quiste. Dentro de cada quiste se pueden encontrar de 100 a 600 huevos.
Este patógeno utiliza los asimilados vegetales para su crecimiento, además destruye los sistemas de conducción de las raíces, limitando así la absorción de agua y de nutrientes. La infestación se manifiesta como manchones pequeños y amarillentos en el cultivo, y el sistema radical se vuelve necrótico y reducido, con una escasa formación de nódulos.
Foto. Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres