La carrera política de Antonio Aracre, conocido en el agro por ser durante años el CEO de la Syngenta, no llegó a superar los cuatro meses: hoy renunció como jefe de asesores del presidente Alberto Fernández.
“A raíz de los rumores que circularon desde anoche y a los efectos de desactivar cualquier operación tendiente a intranquilizar los mercados, le he presentado al presidente Alberto Fernández mi renuncia indeclinable como jefe de asesores de manera inmediata”, indicó el ex CEO de Syngenta esta tarde en redes sociales.
A raíz de los rumores que circularon desde anoche y a los efectos de desactivar cualquier operación tendiente a intranquilizar los mercados le he presentado al Presidente @alferdez mi renuncia indeclinable como Jefe de Asesores de manera inmediata 🧵
— Antonio Aracre (@tonyaracre) April 18, 2023
Vale recordar que en sus últimos días como CEO de Syngenta, allá por diciembre de 2022, Aracre ayudó a apuntalar el operativo “dólar soja 2” que, si bien no fue tan exitoso como el primero, terminó con un número bastante satisfactorio.
Pero ahora el “dólar soja 3” no está mostrando el empuje que debería tener para calmar al mercado. Y las noticias del ministro Sergio Massa pasando una vez más “la gorra” en EE.UU. tampoco ayudaron a tranquilizar los ánimos.
¿Tiene Syngenta tanto poder de fuego como para “romper el mercado” de soja? Los números dicen que no
Los resultados de ese nerviosismo pueden verse sin filtros en las cotizaciones del dólar MEP negociado en el mercado bursátil argentino, que este martes terminó en casi 409 $/u$s y va camino a superar pronto los 410 $/u$s. En lo que respecta al dólar informal (blue), muchas “cuevas” financieras ni siquiera lo vendieron hoy hasta que aclare (o se oscurezca) un poco más el panorama.
Apenas diez días atrás, el 8 de abril, Aracre había afirmado que un salto devaluatorio es siempre empobrecedor y se transfiere a los precios que corren mucho más rápido que el salario. “Ya lo vivimos en 2018 y 2019. Cuando votes este año asegurate de elegir propuestas sustentables en lo económico, pero también en lo social”, había señalado .
Y el 13 de abril sostuvo que “en vez del clásico ajuste, proponemos crecimiento; queremos un Estado innovador, no dinamitarlo; generar empleo y actividad económica en lugar de recetas recesivas; cuidarle los dólares a la industria e impedir que se fuguen”.
Pero, claro, para cuidarle los dólares a la industria, primero es necesario disponer de los mismos, algo que no es factible si el país atraviesa un desastre climático y no existen sectores alternativos –al no haber generado las condiciones necesarias para su desarrollo– que puedan aportar las divisas indispensables para el normal funcionamiento de la economía.