La Bolsa de Cereales de Buenos Aires difundió su “Perspectiva Agroclimática Estacional”, elaborada por el prestigioso agrónomo Eduardo Sierra, que confirma que el fenómenos climático El Niño finalmente llegó en el otoño y mejoró las perspectivas agrícolas de muchas regiones, aunque ha sido poco generoso con otras, especialmente en Uruguay. En el documento se evalúa que el régimen de precipitaciones seguirá siendo favorable, pero con zonas más favorecidas que otras.
¿Cuál será tu situación si este pronóstico resulta acertado?
“Es probable que durante el invierno próximo la gradual activación de El Niño siga llevando alivio a zonas necesitadas de aportes hídricos, pero conservando rasgos extemporáneos: el NOA Argentino, el extremo oeste de la Región del Chaco, el extremo oeste de la Región Pampeana, el sur de Bolivia, el oeste del Paraguay y el sur del Cerrado Brasileño, donde El Niño suele tener efectos deprimentes, observarán precipitaciones normales a muy superiores a lo normal”, avisó Sierra.
Pero, por el contrario, en el área donde El Niño suele ser positivo en materia de lluvias, sólo la Región Oriental del Paraguay, el este de la Región del Chaco, el norte, el sudeste y el sudoeste de la Región Pampeana y el oeste de la Mesopotamia recibirá aportes superiores a la media, mientras que el sur del Brasil, el este de la Mesopotamia, el centro-sur de la Región Pampeana y el Uruguay observarán precipitaciones inferiores a lo normal.
En estos meses, además, “las temperaturas mantendrán un promedio por encima de lo normal, pero con intensas rachas de frío causadas por cortas pero vigorosas irrupciones de los vientos polares, aunque sin llegar a los rigores experimentados en las campañas previas”.
El experto en clima de la Bolsa agrega que en la Primavera El Niño alcanzará su plenitud, aunque la interferencia de los vientos polares le impedirá eliminar totalmente los focos de sequía.
Para esa temporada del año, el sur de la Región Oriental del Paraguay, el sur del Brasil, el centro de la Región Pampeana y el norte de la Mesopotamia registrarán anomalías de precipitaciones leves a moderadas, mientras que el Noroeste del Cono Sur, gran parte de Cuyo, el sudoeste y el sudeste de Buenos Aires y el este del Uruguay experimentarán lluvias superiores a la media.
Sierra agrega que recién durante el Verano 2024, El Niño logrará reducir significativamente el área con déficit de precipitaciones.
Para esa época, que se inicia a fines de diciembre, “la mayor parte del área agrícola del Cono Sur recibirá precipitaciones normales a superiores a lo normal, y sólo una pequeña extensión, ubicada en el límite común de las provincias de Córdoba, La Pampa y Buenos Aires continuará con un leve déficit de precipitaciones”, arriesgó.