Tras una primera quincena de septiembre mayormente seca, en los próximos días gran parte de las regiones argentinas enfrentarán un aumento significativo de la inestabilidad con el retorno de tormentas fuertes y temperaturas elevadas.
“Este cambio en las condiciones meteorológicas es impulsado por la entrada de aire húmedo desde el norte, perturbaciones en altura y condiciones templadas a calurosas, que prometen alterar la rutina diaria en amplias regiones”, explicó Garavaglia, experto de Meteored Argentina.
El proceso, que comenzó ayer domingo con chaparrones y tormentas aisladas en el norte del país, hoy lunes se extenderá al centro del territorio nacional, incluyendo el sur de Córdoba, norte de La Pampa, noroeste y norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe y el Litoral.
En esas zonas los fenómenos podrían intensificarse, particularmente en el Litoral, donde se prevén probables ráfagas de viento, granizo y acumulados de lluvia significativos.
Mañana martes se proyecta como el día más estable de la semana, con cielos parcialmente nublados y temperaturas agradables entre 28 y 32 °C en la mayoría de las regiones.
El miércoles el calor se haría más intenso, alcanzando registros cercanos a los 35 °C en el extremo norte del país, lo que comenzaría a reactivar tormentas en gran parte del territorio argentino.
El jueves y viernes se esperan episodios de lluvias y tormentas, con los mayores acumulados previstos en sectores del norte de la región pampeana, La Pampa y noreste de la Patagonia.
“El fin de semana tendremos al período de mayor inestabilidad y riesgo en el centro y norte de la Argentina, con fenómenos de lluvias y tormentas que adquirirían mayor generalización e intensidad”, advirtió Garavaglia.
Los eventos pronosticados podrían generar acumulados importantes de precipitación, elevando el riesgo de inundaciones y problemas viales en las zonas afectadas por excesos hídricos de la provincia de Buenos Aires.