La incertidumbre relativa a la continuidad o desactivación del régimen de promoción de biocombustibles congeló los programas de inversiones presentes en el sector.
La planta industrial ACABio, localizada en Villa María, Córdoba, tiene actualmente una capacidad de procesamiento anual de 420.000 toneladas de maíz para generar 168.000 metros cúbicos del bioetanol, burlanda y aceite de maíz y dióxido de carbono.
Pero para noviembre de este año la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), propietaria de ACABio junto a otros sesenta cooperativas, tienen planes de expandir la capacidad de procesamiento hasta un total anual de 675.000 toneladas de maíz.
“Esa inversión va a depender de la nueva legislación que esté vigente en la Argentina”, explicó hoy Víctor Accastello, subgerente general de ACA, durante el evento virtual Maizar 2021.
El directivo de ACA indicó que el proyecto oficialista de biocombustibles –que hoy martes obtuvo dictamen favorable en las comisiones de Energía y Presupuesto de la Cámara de Diputados–, que propone reducir el corte interno de bioetanol con nafta, implicaría reducir el nivel de actividad de ACABio a un nivel tan bajo que la empresa no sería viable económicamente.
“Lo que requerimos como mínimo es que el corte de bioetanol se mantenga en un 12% y que en lo posible se aumente a un 15%”, argumentó Accastello.
En 2020 ACABio exportó 15.400 toneladas de bioetanol con certificación sostenible a la Unión Europea y en lo que va de 2021 los embarques hacia ese mercado suman otras 2200 toneladas.
“Logramos demostrar, por medio de certificaciones europeas, que la producción de bioetanol de maíz de ACABio genera un 76% menos de emisiones de gases de efecto invernadero que la nafta; como la Unión Europea exige un mínimo del 70% de ahorro de emisiones, pudimos ingresar sin inconvenientes al mercado europeo y esa es una muy buena noticia”, explicó.
Sin embargo, Accastello indicó que, para que la empresa pueda alcanzar un adecuado nivel de eficiencia por economía de escala, se requiere asegurar la provisión continuada del biocombustible en el mercado interno.
“ACABio esta preparada para exportar y generar divisas, pero para eso debería destinar al menos del 60% de la capacidad de planta para abastecer al mercado local y el 15% a 20% restante para proveer a los clientes externos”, concluyó.