Los administradores de fondos agrícolas que operan en el mercado estadounidense de futuros agrícolas CME Group (“Chicago”) siguen apostando por un escenario ultra bajista para los granos gruesos.
El martes pasado –según publicó este viernes la Commodity Futures Trading Commission– las posiciones netas de los administradores de fondos en futuros y opciones de soja del CME Group se mantuvieron casi sin cambios en el caso del maíz, pero en soja recibieron un “sacudón” de pesimismo.
En soja la posición neta bajista está a un paso de alcanzar el récord histórico registrado a comienzos de marzo pasado, el cual luego se revirtió a causa de problemas climáticos y económicos presentes en Sudamérica y la región del Mar Negro.
Las posiciones netas surgen de la diferencia entre las posiciones compradas (“long”, que fijan un precio techo y por ende apuestan a un mercado alcista) y las posiciones vendidas (“short”, que fijan un precio piso y por lo tanto apuestan a un mercado bajista). Tales registros se difunden con algunos días de retraso para evitar que tal información impacte en las cotizaciones de granos.
Las “apuestas” de los gerenciadores de fondos –cuyo negocio consiste en anticiparse a las tendencias del mercado para obtener una utilidad a través del arbitraje de precios– están fundamentadas en el escenario de una gran producción mundial de granos gruesos 2024/25 y en un contexto de demanda alicaída y sin apuro por concretar compras.
Si bien la campaña de granos gruesos de EE.UU. marcha sin inconvenientes climáticos, aún falta mucho para poder anticipar qué sucederá en Sudamérica, aunque el panorama climático de una fase ENSO “La Niña” se viene desdibujando de manera creciente.
Este viernes International Research Institute for Climate and Society (IRI), organismo dependiente de Columbia Climate School, indicó que el promedio de pronósticos de los modelos de los principales centros climáticos del mundo predicen una probabilidad de ocurrencia de “La Niña” del 52% para el trimestre octubre/diciembre de este año, mientras que dos meses atrás la misma era del 61%.
El fenómeno Niño-Oscilación del Sur (ENSO por sus siglas en inglés), que comprende la variación de parámetros meteorológicos del Océano Pacífico ecuatorial, influye de manera determinante en los regímenes de precipitaciones de diferentes regiones del mundo. Una “Niña” más cercana a un escenario “Neutro” podría no resultar tan perniciosa en lo que respecta a las lluvias previstas durante el período de siembra de granos gruesos en Sudamérica.
En lo que respecta a la proyección preliminar de superficie de granos gruesos en Sudamérica para 2024/25, la consultora brasileña Safras & Mercado proyectó para Brasil un área de 47,33 millones de hectáreas (+1,9% respecto a 2023/24), mientras que la intención de siembra de maíz sería de 21,01 millones (-5,8%).
En cuanto a la Argentina, aún no se publicaron proyecciones privadas ni oficiales de área de siembra para el ciclo 2024/25, aunque es muy probable que el área de soja aumente en desmedro del maíz a causa del desastre productivo generado por Spiroplasma en 2023/24.
Ese escenario se presenta en un momento en el cual los países del Mar Negro, a pesar de su compleja coyuntura, vienen haciendo esfuerzos por incrementar su oferta exportable de soja.
El maíz es el producto que, ante una eventual falla productiva, tiene mayores posibilidades de respuesta en términos de precios, dado que el stock global del cereal viene cayendo de manera progresiva en los últimos años.
Sin embargo, el precio del maíz en EE.UU., que se refleja en Chicago, está fuertemente influenciado por la posibilidad de que el regreso de una “guerra comercial” China-EE.UU. afecte –tal como sucedió en 2018– los valores de exportación del cereal estadounidense.