Guillermo García es vicepresidente de Ciara-Cec (la Cámara de la Industria Aceitera en conjunto con el Centro de Exportadores de Cereales) y a su vez
gerente de relaciones institucionales de Bunge, y se refirió al debate que se está armando en la cadena triguera acerca de la no liberación del nuevo trigo modificado genéticamente con tolerancia a sequía. Fue categórico: “Nosotros aplicamos la política espejo con los mercados y no aprobamos ningún evento que no acepten en el lugar de destino”, dijo a Bichos de Campo.
“Y esta en una política que toman todos los países que producen. Hemos tenido problemas con este transgénico en Canadá, algunas trazas en embarques, que han implicado el cierre del destino”, señaló García.
“No solo Brasil es el tema. Lo mismo se está haciendo con la soja HB4 (también tolerante a sequía), no podemos arriesgar siendo los primeros exportadores de esa harina”, dijo.
Aquí la entrevista completa con Guillermo García:
“En Canadá, Estados Unidos y Australia también está el evento sin liberar. Y a Australia le convendría mucho, por sus zonas secas. Pero son cautelosos en liberarlo, por los mercados”, explicó García.
“El tema del trigo es la resistencia de los compradores al tratarse de un producto de consumo humano directo”, finalizó.