Parece ser que el gobierno de Alberto Fernández necesita pegarse duros golpes en la cabeza para entender cuál es el mejor modo de hacer las cosas. Sucedió con Vicentin y el intento fallido para una expropiación que hubiera sido más costosa que beneficiosa para los argentinos. Y sucede ahora con el problema de acceso a tierras que sufren muchos pequeños agricultores. Los malos modos fueron el grotesco de reforma agraria protagonizado por Juan Grabois y el Proyecto Artigas en el campo entrerriano de Luis Miguel Etchevehere, ex presidente de la Sociedad Rural y ex ministro de Mauricio Macri.
De ese “affaire” que duró quince días, fue muy mediatizado, y terminó con un fallo judicial ordenando restituir el predio a sus dueños verificados, asegurando el derecho a la propiedad, ahora el gobierno de Alberto Fernández quiere salir de un modo más elegante. Cierto es que el líder del MTE no tiene ligazón formal con el gobierno, pero no se puede disimular la simpatía de muchos funcionarios con sus causas y hasta con sus métodos. Por eso a Alberto no le quedó más remedio que sentar una posición dura, como cuando desistió de la expropiación. Primero desalentó la toma de una estancia como la que protagonizó la gente de Grabois, en compañía con Dolores Etchevehere. Después marcó una nueva agenda para la situación: “Quiero que las tierras improductivas del Estado vayan a manos que produzcan”, dijo este martes el Presidente.
Esta frase presidencial no hizo más que visibilizar y bendecir una agenda que está pendiente desde hace varios meses y a la cual el peronismo no le ha dado mucha bolilla hasta el momento. Ahora el gobierno se ve obligado a apurarla, un poco para borrar la macana que se mandó Grabois al forzar las leyes, y otro poco para cumplir con otros sectores aliados, como la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) o el Movimiento Arraigo.
Bichos de Campo informó oportunamente del plan oficial para destinar tierras fiscales a la formación de nuevas colonias “agroecológicas”. El “gabinete de tierras” se armó en julio pasado, pero desde allí no ha habido avances concretos.
El gobierno tomó el guante de una reforma agraria light y armó un “gabinete de tierras”
Las declaraciones de Alberto respecto de que ahora sí se desea alentar este proceso se produjeron justamente en una reunión organizada en el marco de los equipos técnicos del PJ, bien lejos de los movimientos sociales como el de Grabois. Allí tuvo la participación del senador provincial bonaerense Francisco “Paco” Durañona, referente del Movimiento Arraigo. Esa agrupación es una de las que desde el peronismo impulsa la creación en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires de un nuevo plan para crear colonias rurales sobre predios pertenecientes al Estado. Según el presidente, “sobran las tierras fiscales”, aunque todavía no se conoce un relevamiento exacto sobre ellas.
Sí @alferdez tenés razón!
Hace años proponemos #ProcrearRural y #ColoniasAgroecológicas para acceder a tierras y abastecer de alimentos sanos. Hace poco presentamos Proy ley con @CECILIAMOREAU en congreso nacional y con @pacoduranona en provincia Bs As.#MasColoniasMenosHambre pic.twitter.com/1PcOX9NxuE— Unión de Trabajadorxs de la Tierra (@uttnacional) November 11, 2020
Tomando distancia del MTE Rural de Grabois, la UTT que dirige Nahuel Levaggi -el presidente del Mercado Central de Buenos Aires- aprovechó las declaraciones presidenciales para recordar que esa agrupación de pequeños productores, en especial horticultores de los conurbanos, ya presentó en tres ocasiones un proyecto de ley para crear una suerte de plan Procrear para el agro. Es decir un plan que permita a los productores sin tierra acceder a un crédito blando y a largo plazo, para llegar al sueño del lote propio y poder construir allí una vivienda y mejoras, como invernaderos. Ese proyecto de ley perdió estado parlamentario ya dos veces y volvió a ser presentado justo cuando le Proyecto Artigas intentaba montar una colonia agroecológica en la estancia de los Etchevehere.
“Hace más de 10 años desde la UTT estamos acumulando experiencia con la propuesta de las colonias agroecológicas y podemos dimensionar una importante producción hortícola de gran impacto en la provisión de alimentos frescos para los mercados próximos”, expresó Agustín Suárez, vocero de la organización, que el jueves 12 inaugurará una nueva colonia “de abastecimiento urbano” en tierras cedidas por la Municipalidad de Castelli, en Laguna Almirón (a unos 5 kilómetros de la ciudad cabecera) cercana a la Ruta 2, en el interior de la provincia de Buenos Aires.
No son los del Movimiento Arraigo y los de la UTT los únicos sectores del amplio abanico oficialista que proponen planes de acceso a la tierra. También existe un proyecto de ley que ingresó al Congreso Nacional que promueve una “Marcha al Campo”. Se imaginan el traslado de gente de las grandes ciudades a colonias agropecuarias bien planificadas, con todos los servicios y con asesoramiento del INTA y las provincias. En ese caso, se plantea utilizar tierras fiscales, pero siempre cedidas a los beneficiarios en comodato de largo plazo, para que luego no devenga todo en un negocio inmobiliario.
Como sea, el reconocimiento del presidente de que algo debe hacerse en este asunto no solo activó la discusión sobre estos planes sino también las declaraciones de otros funcionarios públicos, que hasta ahora hablaban poco y nada del asunto, considerado medio tabú por parte de la política.
El ministro de Agricultura, Luis Basterra, es uno de esos funcionarios. Consideró que el proyecto de la UTT para el acceso a la tierra para agricultores familiares a través de créditos blandos “tiene un abordaje innovador”, ya que calificó el asunto como una de las problemáticas principales del sector que “hoy se disputa el recurso suelo con la inversión inmobiliaria”.