El agro es como aquel adolescente que necesita del reconocimiento de sus mayores para salir a pelear la vida, removiendo los obstáculos que se le pongan delante.
Esta figura psicoanalítica explica el por qué cada tanto las organizaciones del sector reavivan los estudios para mensurar la importancia del sector y sus aportes relevantes para el resto de la Argentina. Lo han hecho todos en su momento y esta semana la actualización de ese “digesto” correspondió al equipo de expertos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

“Las cadenas agroindustriales explican en torno al 20% de la economía del país, uno de cada cinco puestos de trabajo, cerca del 20% de la recaudación del estado nacional y tres de cada cinco dólares exportados en la República Argentina” fue el resumen de este trabajo destinado más al autoconvencimiento que a convencer al resto de la sociedad, que demanda estas cifras mucho menos que el propio sector.
De todos modos ahí está: de nuevo este ejercicio necesario para una justa valoración de lo que es el agro. Es como un DNI sectorial, un currículum vitae, una carta de presentación.
La primera afirmación es que “las cadenas agroindustriales explican en torno al 20% del valor agregado bruto nacional”. Se sustenta en que “en el año 2024, representaron 1,8 pesos de cada 5 pesos del Valor Agregado Bruto (VAB) nacional, es decir, una participación del 18%”.

Lo interesante de esta actualizacion es que “marca un repunte tras el fallido año 2023, que producto de la histórica sequía dejó la participación del agro en un mínimo de la serie desde 2004, con un share del 16%”.
De todos modos, en una mirada más extensa las cadenas agroindustriales muestran un desarrollo importante en la generación de VAB anual entre 2004 a 2011, con un crecimiento para dichos años del 33,15% entre puntas. De todos modos, su incidencia en la economía viene disminuyendo, por cuanto “la economía en su conjunto crece 46,7% en dicho período”.

¿Cuáles son las principales ramas de actividad en la generación de valor agregado dentro de lo que consideramos las cadenas agroindustriales?

La clasificación de actividades de las cadenas agroindustriales se divide en: “Agricultura, ganadería, caza y silvicultura”, “Pesca”, “industria manufacturera”, Comercio”, “Actividades inmobiliarias y empresariales” y “Transporte, almacenamiento y comunicaciones”. En el gráfico de la BCR se puede observar el rol preponderante que tiene la “industria manufacturera” dentro del total, con una participación promedio del 40,7% para todo el período bajo análisis.

Continúa en nivel de importancia la actividad primaria de “agricultura, ganadería, caza y silvicultura” con una participación promedio del 35%. De esta forma, estas dos grandes ramas de actividad representan en torno al 75,7% del VAB que generan anualmente las cadenas agroindustriales. En nivel de importancia, le siguen “comercio” con una participación promedio del 17,6%, “actividades inmobiliarias y empresariales” con 3,3% y, por último, “transporte, almacenamiento y comunicaciones” con 1,8%.
Luego del análisis de a participación del agro en el PBI, pese a su importancia, la autoestima puede quedar algo baja. Por eso este análisis suele incluir siempre al análisis del comercio exterior. Allí, promediando los 20 años del período 2004-2024, la agroindustria representó el 56% de las exportaciones nacionales.

Hubo oscilaciones en esta mirada histórica. Con sus respectivas cosechas y picos de precios internacionales, ha llegado a explicar más del 67% de las exportaciones en años como el 2020 y 2021. Tanto en 2024 como en el primer semestre del 2025 los complejos de la agroindustria representaron el 58% de la canasta exportable argentina.
Se destacan obviamente los principales cultivos cosechados e industrializados en el país. En este sentido, los complejos soja, girasol, maíz, trigo y cebada representaron cerca del 70% de las exportaciones agroindustriales y el 41% del total exportado en 2024. No conforme con ello, de los principales diez complejos exportadores del país, siete son agroindustriales.
Además, las exportaciones de la agroindustria argentina son de las más federales del país. El agro encuentra arraigo en todas las regiones del país y en 11 de las 24 jurisdicciones del país representa más del 70% de las exportaciones provinciales.

En este marco, remarca la Bolsa de Rosario que “la agroindustria tiene un rol esencial en el aporte neto de divisas al país por sus exportaciones. El agro y la minería fueron los dos únicos aportantes netos de divisas al país en las últimas dos décadas. En el período 2004-2024 la agroindustria hizo un aporte neto al balance cambiario por más de 644.400 millones de dólares. Esto representó a su vez el 92,5% de las divisas netas de la economía argentina”.
Excluyendo al agro y la minería, el resto de los sectores económicos generó el período 2004-2024 cerca de 400.000 millones de dólares en “aporte negativo al balance cambiario”, es decir, importaciones por encima de exportaciones.
Pero hace falta más para sentirse importantes: “Las cadenas agroindustriales explican 1 de cada 5 pesos recaudados por el Estado Nacional”, describe el informe.

Para justificar lo anterior se señala que “el año 2024 el campo y las cadenas agroalimentarias y agroindustriales en nuestro país habrían generado una recaudación tributaria para el Estado Nacional de 26.281.595 millones de pesos. Considerando que la recaudación anual reportada por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) totalizó 142.031.453 millones durante el año pasado, el campo y las cadenas agroindustriales habrían representado un 19% del total, es decir, cerca de 1 de cada 5 pesos ingresados a las arcas del Tesoro”.
Para el cómputo se contempló a las cadenas de oleaginosas y cereales, harinas, aceites y demás derivados de su industrialización; el sector bovino, porcino, avícola, lácteo, algodonero, pesquero, forestal, la industria del tabaco, el sector frutícola, hortícola, y las producciones agroindustriales correspondientes a las economías regionales.

Los impuestos considerados fueron el Impuesto al Valor Agregado, Derechos de Exportación, Impuestos a las Ganancias de Sociedades y Personas Físicas e Impuestos a los Débitos y Créditos bancarios, Bienes Personales, Aportes de la Seguridad Social y Contribuciones de la Seguridad Social.
El impuesto de mayor incidencia dentro de la tributación del sector es el IVA, que representa el 46% del total aportado por el sector, pero se observa una recuperación en la proporción que representa el aporte de los Derechos de Exportación (19% en 2024 vs. 15% en 2023). No obstante, se encuentra lejos de la participación que llegó a alcanzar en 2021 y 2022 (32% y 31%, respectivamente), años de elevados precios internacionales.
Pero falta más. Y en ese sentido este nuevo informe de la BCR remarca que el 21% del empleo privado en Argentina está relacionado directa o indirectamente con las cadenas agroindustriales.

Dice el documento: “Se estima que el total de empleo estimado generado por las cadenas agroindustriales y agroalimentarias en el 2022 fue de 3.969.000 puestos de trabajo, lo que representa el 21,2% del empleo privado del país”.
De este total, 1.427.000 (el 36%) personas estuvieron empleadas en el sector de Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura, 24.000 en el sector Pesca, 1.282.000 en el sector de Industria Manufacturera, 1.142.000 en el sector de Comercio Mayorista, Minorista y Reparaciones; 75.000 en el sector Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones; y 18.000 en el sector de Actividades Inmobiliarias, Empresariales y de Alquiler”
La conclusión del trabajo es la obvia: “En conjunto, la evidencia presentada confirma que la cadena agroindustrial es un pilar estructural de la economía argentina. Su aporte simultáneo al valor agregado, al empleo privado, a la recaudación fiscal y, especialmente, al ingreso neto de divisas, las convierte en un componente insustituible para la estabilidad macroeconómica, el desarrollo federal y la capacidad de crecimiento del país”.
Dale pibe, salí, andá, triunfá…






No entiendo el tono de la nota. Es francamente desagradable y en buena medida ofensivo. ¿O el objetivo es cuestionar los datos presentados? Y el final:” Dale pibe, anda, triunfá..” Les faltó decir que la soja es un yuyo o algo por el estilo. No entiendo…