El gobierno de Javier Milei acaba de eliminar la exención de aranceles en el Senasa de que gozaba desde hace años los pequeños productores integrantes del Registro Nacional de Agricultura Familiar (Renaf), en una clara demostración de que para los libertarios no hay matices y todo es lo mismo en el campo argentino. Alguno se sorprendió con eso, pero en realidad es una línea de trabajo que viene recorriendo esta gestión desde que asomó en diciembre de 2023.
Desde los 900 despidos en el área de Agricultura Familiar a un intento de eliminación directa de ese área de gobierno (que se evitó en el Congreso), hasta la suspensión de los créditos que distribuía la Ley Ovina, muchas otras decisiones del gobierno de Javier Milei iban en ese sentido: ignorar la existencia de un gran número de comunidades campesinas o de la agricultura más tradicional, arraigada en los territorios. Y por lo tanto descartar las políticas públicas para ayudarla.
Pero el intento más profundo en esta senda de invisibilizar a un vasto sector de la producción agropecuaria nacional (la que los obtusos funcionarios de la Secretaría de Agricultura liderados por Sergio Iraeta parecen desconocer y solo consideran refugio de la militancia kirchnerista de otras gestiones) fue el intento de eliminación de la Experimental del INTA en el AMBA y del CIPAF, que es un instituto del INTA dedicado especialmente al desarrollo y difusión de tecnologías para pequeños productores.
Luego de que el Congreso decidiera en agosto pasado no dejar pasar la decisión de Milei de degradar el INTA y otros organismos descentralizados, para que pase a depender directamente de Economía, hubo un impasse muy grande hasta que esta semana volviera a reunirse el Consejo Directivo de la institución, donde sabiamente deben compartir la conducción los representantes del Ejecutivo con los de la actividad privada. De hecho hay tres funcionario (el presidente, el vice y un delegado de Agricultura) que deben coexistir y ponerse de acuerdo con cinco delegados de entidades rurales (las cuatro de la Mesa de Enlace y uno por los grupos CREA) y dos de la universidad pública (Agronomía y Veterinaria).
Este miércoles sucedió, luego de tres meses de reacomodar fichas, la primera reunión de dicho espacio, máxima autoridad del INTA, ahora revalidadad. En la misma, el gobierno de Milei insistió en plantear casi la misma agenda que viene sosteniendo para el INTA: reducción del personal, venta de campo y reducción de las áreas dedicadas a la extensión (transferencia de tecnología y conocimiento) hacia los productores. De todos modos, Nicolás Bronzovich, el presidente, bajó un poco las ínfulas y se mostró más conciliador. De hecho, el primer punto del temario que tenían por discutir era la aprobación de un viaje que él mismo hizo a un congreso a Croacia, dedicado a la inmigración de ese origen.
Respecto de los achiques de personal, se volvió a hablar del demorado retiro voluntario, aunque no terminó de resolverse. Lo mismo sucedió con la posible venta de campos experimentales que no se estén usando. Lo que se planteó es que sean los Consejos Regionales del INTA (y no los agentes inmobiliarios de la AABE) los que hagan un listado de esas disponibilidades.
Hubo una intención de mejorar los modos de trabajo. Según una minuta de la reunión enviada por el gremio Apinta a partir de algunos testimonios, a partir de ahora “cada consejero Nacional trabajara con una regional manteniendo contacto con los integrantes del Consejo Regional”, de modo que las cosas que se decidan en Buenos Aires tengan cierto anclaje regional. Por otro lado, se supo que el Consejo ahora comenzará a sesionar dos veces mensuales en vez de solo una. La próxima reunión sería el 27 de noviembre.
Pero a la hora de llegar al tratamiento que dará el INTA al sector de la Agricultura Familiar no hubo avances. Por el contrario, la presidencia del organismo ratificó que se procederá al cierre de la Estación Experimental del AMBA y se apurarán los traslados a otras área de los trabajadores que estaban en dicho ámbito. Como las entidades rurales habían votado favorablemente esa decisión con la anterior conformación del Consejo, no pudieron ni chistar.
Pero hubo un matiz que es muy necesario remarcar: la única entidad de la Mesa de Enlace que hasta aquí mostró más los dientes a este avasallamiento del INTA -con sus consejeros votando incluso en contra de la mayoría, en soledad- planteó una alternativa para tratar de evitar el desguace de todas las áreas del organismo dedicadas a trabajar junto a los pequeños productores.
Se trata de la Federación Agraria Argentina. Su representante en el INTA es Gustavo Tettamanti. Este ingeniero agrónomo comenzó a desplegar una estrategia diferente avalada por la titular de la entidad, Andrea Sarnari, que en algunos temas está comenzando a matizar saludablemente respecto del resto de las entidades de la Mesa de Enlace.
En un informe que Ariel Pereda, el director nacional del INTA, presentó ante los directores de los Centros Regionales del INTA hay una referencia a esta estrategia anti “terraplanismo” libertario. Allí se menciona que para la AFCI (Agricultura Familiar, Campesina e Indígena), se definirá un nuevo “mapa temático” dentro del INTA, para luego tratar de discutir una “estructura acorde” para poder desarrollarlo. Ya no se suprime de plano, sino que se discute.
“Federación Agraria comenzó a llevar adelante el proceso de relevamiento de temas de investigación junto al CIPAF”, menciona la minuta de la reunión, dando por establecido que será esa entidad -históricamente ligada a los reclamos de ese sector- la que se ocupará directamente de ese capítulo.

La movida de revisar la política del INTA para esos segmentos de productores para así poder mantenerla, reformando lo que sea necesario, incluso la denominación . Debería implicar este trabajo un análisis directo sobre el CIPAF y sus institutos dependientes (los IPAF) que generan tecnologías para los pequeños productores.
Según las fuentes consultadas, el ofrecimiento del federado Tettamanti para poner a resguardo esta sección del INTA de la motosierra libertaria contaría a su vez con el respaldo de la Mesa Agroalimentaria, especialmente de las cooperativas de Fecofe, que agrupa a una serie de cooperativas que se desprendieron hace muchos años de la propia Federación Agraria.






Dentro de su rica historia, cuenta el alineamiento con la SRA dentro de la Mesa de Enlace.
Se dejan usar por los grandotes. Humberto Volando los metería a todos presos