El frente frío instalado en gran parte del país continuaría desplazándose sobre el centro y norte del territorio hasta mañana viernes 18 de julio, mientras que a partir del sábado comenzarían a subir las temperaturas mínimas.
Recién a partir del próximo martes 22 de julio se prevé un nuevo ingreso de una ola polar que promovería heladas intensas en el norte patagónico y moderadas a leves en el sur de Cuyo, provincia de La Pampa y sudoeste de Buenos Aires.
En el norte argentino entre el domingo y el martes comenzarían a subir progresivamente las temperaturas máximas para alcanzar niveles superiores a los 30 grados centígrados en algunos sectores.
El mal tiempo persistirá este jueves en sectores del noreste de Buenos Aires y parte del Litoral, pero a partir de este viernes se proyecta una racha sin precipitaciones en todo el centro y norte del territorio argentino que se extendería hasta el martes de la semana que viene.
Por otra parte, el pronóstico tentativo indica que hasta el próximo 28 de julio no se esperan precipitaciones importantes en toda la zona pampeana; sólo habría lluvias con acumulados moderados en sectores del NEA hacia fines del presente mes.
Se trata de una buena noticia luego de las lluvias torrenciales que generaron importantes acumulados –inéditos para esta época del año– en gran parte del sur de la zona pampeana.
El lunes 21 se espera mal tiempo sobre el norte de la Patagonia con precipitaciones que podrían sumar entre 10 a 30 milímetros en Río Negro, Neuquén y el norte de Chubut.
El frente de tormentas persistiría el martes 22 en el sector este del norte patagónico, aunque con menor intensidad. También se espera inestabilidad en el este de la provincia de Buenos Aires.
Fuente. Instituto de Agua y Clima INTA Castelar