La sensación de los empresarios del rubro semillas es mitad ganas y mitad miedo. Pero aún así lograron que no los venza el temor y decidieron moverse, pidiendo una audiencia desde la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA) al ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger.
Las ganas que los impulsaron a pedir esa cita son las de reeditar una agenda proactiva, que vuelva a instalar la necesidad de contar con reglas claras que eviten el comercio ilegal de semillas y permitan a los investigadores cobrar un retorno razonable por sus desarrollos, sobre todo en soja y trigo. El gobierno de Javier Milei, ni bien asumió y presentó la primera versión de la Ley Bases, amagó recorrer ese camino, al pretender adherir al convenio internacional UPOV 91. Pero después reculó y guardó violín en bolsa. No volvió a hablar siquiera del asunto.
El miedo es que el gobierno libertario elija un camino equivocado para volver sobre esta discusión.
Hace algunas semanas, tanto el ministro Sturzenegger como el propio presidente Javier Milei anticiparon una ofensiva para eliminar decenas de organismos inútiles del Estado nacional, que por ahora quedó en la nada, pero sigue rondando en el aire. El temor de la industria semillera es que en algún momento esa iniciativa avance y eche por tierra con el Instituto Nacional de Semillas (Inase), como ya sucedió en la gestión de Fernando de la Rúa, que eliminó ese organismo y provocó un retroceso que demandó muchos años recuperar.
Por eso este pedido de entrevista cauteloso, que intenta volver a instalar una ofensiva en pos de una nueva política sobre semillas que ya lleva décadas de demora, pues la ley vigente data de 1973 y no contempla la mayor parte de las innovaciones de las últimas décadas, comenzando por la biotecnología.
Bichos de Campo accedió a la carta enviada por ASA al ministro Sturzenegger:
Solicitud de Audiencia FS (1)
“En nombre de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), institución que nuclea a empresas líderes comprometidas con la investigación, la innovación y el desarrollo genético vegetal en nuestro país, solicitamos una reunión con usted y con su equipo de trabajo para compartir nuestra visión y propuestas respecto al estratégico rol del INASE”, dice la nota, exponiendo de entrada la .preocupación empresaria por el destino de ese organismo autárquico que depende de la Secretaría de Agricultura.
Luego de elogiar la decisión del gobierno de La Libertad Avanza para “reinsertar a la Argentina en los mercados globales” y expresar apoyo a “la necesidad de incrementar la productividad, fortalecer la competitividad y acceder a nuevos mercados”, los integrantes de ASA anticiparon cuáles serán sus reclamos si el ministro accede a escucharlos.
“Queremos enfatizar la importancia crítica de contar con un marco normativo sólido y actualizado, que garantice claramente los derechos de propiedad intelectual. Este aspecto es determinante para sostener y ampliar las inversiones actuales, atraer nuevo capital extranjero y continuar posicionando internacionalmente al sector semillero argentino”, afirman. Luego enfatizan que para eso será necesario fortalecer el INASE y no disolverlo, como se especulaba.
Claramente la industria semillera busca volver a instalar la discusión sobre el cobro de regalías adecuadas. En ese sentido, la carta destacó “la propuesta inicial del Gobierno Nacional incluida en el proyecto de Ley Bases, que contemplaba la adhesión al Acta de UPOV 91. Consideramos que esta adhesión representa un salto cualitativo esencial respecto al marco normativo actual”.
“Cabe señalar que desde ASA hemos impulsado un amplio consenso institucional alrededor de esta iniciativa, contando con el apoyo explícito de más de 30 instituciones, cuyos respaldos fueron oportunamente comunicados a los señores diputados”, dice la carta, omitiendo que la mayor resistencia a esa medida surge de las entidades gremiales de la Mesa de Enlace.
UPOV91 es lisa y llanamente un robo directo al productor y una entrega de la soberania alimentaria del pais. Hablan de libre mercado y luego que les den el monopolio de las semillas. Si no les sirve, que no vendan. Este modelo productivo ha reducido a la mitad la cantidad de productores, concentrado la produccion y ha hecho que los medianos y pequeños productores queden presos y deban pasar su renta a las semilleras y agronomias. NO ROTUNDO A UPOV91