Pese a la rebaja de retenciones dispuesta por el gobierno nacional, los productores están inquietos por la rentabilidad escasa que se preanuncia para la próxima cosecha 2024/25. La presión fiscal se sigue sintiendo en el sector y por eso la Sociedad Rural de Río Cuarto, en el sur de Córdoba, decidió comenzar a mover el avispero y convocó a una asamblea el próximo lunes.
Una curiosidad de esta reunión -que se realizará en la sede de la entidad el próximo lunes 10 desde las 18- es que las quejas no se orientarán solamente hacia el gobierno nacional que -a pesar de las bajas- sigue aplicando retenciones a las exportaciones de los granos, que recortan artificialmente los precios de la soja y el maíz. Y por lo tanto reducen el ingreso de los productores.
“La entidad invita al gobernador de la provincia de Córdoba, Martín Llaryora, a estar presente en dicha asamblea para que pueda conocer, en primera persona, el descontento generalizado que existe y, sobre todo, las causas de ese descontento”, definió la Rural de Río Cuarto, dejando claro también que la reunión abordará el tema del impuesto inmobiliario provincial.
En la convocatoria, los ruralistas cordobeses se quejan de hecho que las partidas de ese impuesto están llegando con subas de entre 200 y hasta 300%. Se desliza que Llaryora critica a la Nación por las altas retenciones pero a la vez aplicar el garrotazo impositivo a nivel provincial.
Por eso los ruralistas consideraron que su asamblea “es también la oportunidad para el gobierno provincial de acercarse, también y a través del testimonio de los mismos productores, a la realidad que transitan y a las problemáticas que les impiden hacer lo que saben y quieren hacer, que es producir de la mejor manera y con los mayores beneficios para la sociedad”.