La concursada Molino Cañuelas alcanzó las mayorías requeridas para la aprobación de la propuesta de rescate diseñada por la compañía en el marco de su proceso judicial de reestructuración financiera.
El concurso preventivo involucró a más de 650 acreedores y un pasivo quirografario de 1290 millones de dólares, donde se contó con el 89,0% de respaldo de los titulares de la deuda quirografaria que representan al 60% de los acreedores.
La razón de esa brecha, en lo que respecta a la mayoría alcanzada, entre el capital y la cantidad de acreedores reside en el hecho de que los mayores integrantes de la masa concursal corresponden a entidades bancarias tanto internacionales como locales.
Si bien las tres propuestas de pago presentadas (contado, corto plazo y largo plazo) no convencieron a buena parte de los acreedores granarios y comerciales, ahora, con la mayoría lograda, es muy probable que tengan que elegir una de esas opciones para recuperar parte de su capital.
“Habiendo presentado las mayorías dentro del período de exclusividad, se aguarda que la homologación judicial se formalice próximamente”, señaló la empresa de la familia Navilli por medio de un comunicado.
“Este acuerdo refuerza el compromiso de Molino Cañuelas con sus empleados, clientes, proveedores, acreedores, y organismos gubernamentales, como también con todos aquellos consumidores que han mantenido inalterada la confianza en sus productos”, añadió.
“Asimismo, la compañía hace extensivo un sincero agradecimiento a los acreedores por el apoyo brindado durante este proceso, como también a los equipos técnicos, asesores y accionistas que activamente participaron en su logro”, expresa el comunicado.
Molino Cañuelas cuenta con veinte plantas industriales en la Argentina y la región que dan trabajo a unas 3500 personas de manera directa. Gestiona las maras Cañuelas, Pureza, 9 de Oro, Paseo, San Agustín, Mamá Cocina y Florencia, entre otras.