Alejandro Brandan estaba henchido de orgullo. Días atrás, en la reciente edición de la ExpoBra, en Santiago del Estero, participó por primera vez con Will Smith, uno de los primeros productos de su flamante cabaña La Simonette, y en esa primera incursión con un toro Brangus obtuvo el premio campeón 2 años, el mejor toro a bozal de la Exposición y el tercer mejor macho de la exposición.
Esa primera cucarda resultó muy significativa para La Simonette. El establecimiento se levantó, justo después de perder en 2023, una completísima cabaña que Brandán trabajaba junto a su padre en la Estancia Las Pencas, ubicada en Villa de María de Río Seco en Córdoba, también acreedora de varios galardones en la Rural de Palermo.
“Yo empecé a trabajar con la compañía Anglo en el año 2002, de ahí en adelante, me hice cargo de la parte ganadera, de los núcleos genéticos. Nosotros logramos ser campeón nacional en Palermo 2018 y 2019 en la raza Brahman. Así que tenemos toda una trayectoria. Pero desgraciadamente tuvimos que vender todo nuestro núcleo genético”, contó Brandan a Bichos de Campo.
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Sucede que la sequía de los últimos tiempos dejó sin alternativa a la familia y para sostener los campos tuvieron que liquidar toda la hacienda. Pero Brandán sabía que no abandonaría definitivamente la ganadería y dejó bajo su resguardo a unos pocos ejemplares Brangus.
“Yo compré algunos terneros de esa liquidación que hicimos de la cabaña que teníamos con la Compañía Anglo. Compré unas terneras y terneros Brangus y de esos poquitos productos, vine con uno de ellos a participar en ExpoBra y ganar la primera cucarda con la cabaña La Simonette, que la tengo junto con mi hermano.
Alejandro no solo es un cabañero que desarrolla genética tranqueras adentr, sino que es un veterinario que desde su conocimiento y experiencia en la actividad, asegura que las tres razas norteñas (Brangus, Brahman y Braford) son imprescindibles. Él elogia particularmente a la Brahman y su incidencia determinante en el mejoramiento del rodeo.
“Los genes que vienen del Brahman son fundamentales para aportar rusticidad, resistencia a los parásitos y al calor. Es decir, aguanta el clima, aguanta en las condiciones un poco más extremas. Todo esto es muy importante para el desarrollo de la ganadería del norte y lo vemos como una herramienta muy necesaria que realmente aporta mucho a la ganadería nacional”, explicó.
Al mismo tiempo especificó: “Cada raza hace sus aportes, pero nosotros vemos que para el desarrollo de determinada zona necesitamos la rusticidad que aporta la raza Brahman y por eso la estamos siguiendo. También estamos trabajando con Brangus que me parece que es la raza que mejor se adapta en algunas zonas, principalmente en la que yo trabajo”.
La ganadería del norte en los últimos 20 años ha crecido mucho principalmente por la profesionalización del manejo y la el desarrollo de la genética. Sin embargo, los productores insisten en que falta una mejor infraestructura para consolidar ese auge.
Al respecto señaló Brandan: “Básicamente necesitaríamos poder abrir nuestros mercados al mundo y tener rentabilidad en nuestra producción. La producción de carne argentina tiene que tener el mismo valor que en el resto del mundo. Nosotros tenemos un gran potencial para producir carne, lo mismo en todo el norte que en distintas zonas de Argentina. A los ganaderos lo que les tenemos que darle es rentabilidad y cuando el negocio tenga rentabilidad, entonces la gente va a invertir”, concluyó.