Fue anticipo de Bichos de Campo: Este lunes saldría publicado en el Boletín Oficial el demorado decreto de reorganización del Ministerio de Economía hasta el nivel de subsecretarías y allí se confirma el cambio de denominación de la histórica Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca como flamante Secretaría de Bioeconomía. Pero a la par se confirma que, al menos en el gobierno de Milei, quedó lejos de poder ser considerada un Ministerio, pues se confirma su subordinación a los dictados del Palacio de Hacienda.
Esa reorganización de nombres y cargos fue utilizada por quien se convertirá en el flamante “secretario de Bioeconomía”, el ex decano Fernando Vilella, para justificar un brutal cercenamiento de su poder en el gobierno, hasta reducirlo casi a una figura decorativa. En el mismo momento en que el presidente Javier Milei firmaba el decreto defiendo un nuevo organigrama, el ministro de Economía, Luis Caputo, despedía a los dos principales colaboradores de Villela, ambos productores agropecuarios y representantes activos, y no teóricos, de la tan mentada bioeconomía.
Pedro Vigneau había sido presidente de Maizar, en los congresos de esa entidad se vestía con trajes y zapatos confeccionados con derivados del maíz, y había desembarcado en el gobierno para convertirse en el segundo de ese área. Germán Di Bella era número puesto para ser director nacional de Agricultura y fue uno de los productores de Río Cuarto que fundó la fábrica de bioetanol Bio4, que transforma los cultivos en energía.
El recorte del poder de Vilella fue mayúsculo y ha sido tan evidente que, según versiones fidedignas, incluso el secretario llegó a amagar con renunciar el jueves, cuando comenzó la ofensiva final de Economía sobre Vigneau, a quien unos le atribuyen demasiadas ambiciones políticas y otros le reprochan ser una voz crítica de la aplicación de retenciones decidida por Caputo. Pero la dignidad de Vilella para irse del gobierno se habría acabado muy pronto, cuando le prometieron el cambio de denominación a Bioeconomía, con el que tanto había soñado.
“Se trata de un rediseño del gabinete para seguir enfocados en la gestión del productor”, dijeron los voceros de Vilella al diario La Nación para explicar lo inexplicable. Nadie entendió por qué si lo que se buscaba era favorecer al productor se echó a dos productores genuinos y se mantuvo en su puesto solo a un académico. Como sea, ahora Vilella será flanqueado por otros dos “productores” designador directamente desde Economía.
Lo insólito, en este contexto, es que el propio Vigneau -despedido de mal modo- festejó la situación en las redes sociales. “Hoy es un día histórico, somos el país con la primer secretaria de Bioeconomía del mundo!! Felicito al gobierno, al equipazo de la secretaría liderado por Fernando Vilella y al ministerio. Orgulloso de haber sido parte. VLLC!!!!! Es por acá. Estos la ven!!”, dijo, citando no se sabe si con ironía a Javier Milei y el popio Luis Caputo.
Hoy es un día histórico, somos el país con la primer secretaria de BIOECONOMIA del mundo!! Felicito al gobierno, al equipazo de la secretaría liderado por @vilellafer y al ministerio. Orgulloso de haber sido parte. VLLC!!!!! Es por acá. Estos la ven!! @JMilei @LuisCaputoAR pic.twitter.com/axLCSWlC0z
— Pedro Vigneau 💙 (@pedrovigneau) April 6, 2024
Si era una ironía o no, nunca lo sabremos. Lo que quedó más que en evidencia es que casi nadie con un poco de lucidez creyó ni creerá que cambiar el nombre de la Secretaría de Agricultura por Bioeconomía sea un hecho histórico, que vaya a modificar en algo el curso de los acontecimientos que vive el sector productivo.
Quedó claro que la “actuación” de Vigneau no convenció a nadie en los comentarios que recibió su posteo:
“Si luego de 100 días de gestión lo único que se puede mostrar de “éxito” es un cambio de nombre de una secretaria que no fue considerada en nada para la implementación de las políticas nacionales… Esta claro hacia donde vamos. ¿Se darán cuenta o siguen sin verla?”, se preguntó el analista Carlos Etchepare.
“¿Histórico? Todo biosarasa, lo dije antes que asuman, lo importante pasa por otro lado. Cometen los mismos errores que los anteriores”, confirmó el productor autoconvocado de San Nicolás Ariel Bianchi.
Y así:
Por que no dejan de hacer pelotudeces y se ponen a laburar enserio. Tremendas sequias, chicharrita, retenciones, insumos por las nubes y ustedes en una nube de pedos. Dios los cria y el viento los BIO amontona
— Cesar Bruera (@BrueraCesar) April 6, 2024
un día “histórico” sólo porque una dependencia de un organismo público cambia de nombre? dos opciones, a Ud le gustan las argucias y su post es un mamarracho que subestima la inteligencia de los demás, o Ud es ajeno a la realidad del agro y se cree lo que posteó
— Gaucho urbano (@urbano_gaucho) April 6, 2024
Felicitas el “cambio de nombre”…. y los productores te putean!!!
— mauricio picot (@mauriciopicot) April 7, 2024
Karma. Todos esos que lloriquean votaron a Peluca.
Hermoso.