Por estos días las filas para cargar nafta o gasoil en las principales ciudades argentinas ha sido una postal recurrente. Y según denuncian los grupos productores, en el caso del diésel -el más utilizado en el campo- todavía se vende en muchas zonas con cupos tanto mayorista como para los vehículos. Mientras esto sucede, hubo una flota de ómnibus en Rosario que se movilizó lo más bien utilizando biodiésel al 100%, el renovable que puede sustituir el gasoil y que aquí se elabora a partir del aceite de soja.
El ingeniero mecánico Alberto Garibaldi hace dos años atrás llevó adelante un exitoso ensayo sobre el uso del biocombustible elaborado a base de aceites, en una flota de un poco más de 400 colectivos de la ciudad de Rosario, para llegar a la conclusión que el biodiesel elaborado de acuerdo a las normas de calidad puede sustituir por completo al gasoil. Cuando la Argentina se decida.
Actualmente la Argentina a la que le falta gasoil utiliza ese combustible con un corte obligatorio de 7,5% de biodiésel, que es provisto por un conjunto de empresas pymes a las petroleras. Pero hay otras grandes empresas, sobre todo de la industria aceitera, que hacen ese biocombustible para la exportación y que argumentan que hay capacidad instalada para hacer crecer el corte a por los menos 20%. Hay soja e instalaciones para hacerlo. ¿Pero funcionarán las flotas de vehículos que utilicen esa mezcla con tanta presencia del combustible vegetal?
En este contexto, la experiencia liderada por Garibaldi es fundamental. “Hicimos treinta y pico de millones de kilómetros, en una flota de colectivos de distintas marcas y modelos. Hicimos prueba con 25% de biodiesel mezclado con 75% de gasoil y funcionó tan bien que en algún momento se decidió probar con biodiesel puro. Probamos con algunas unidades y no pasó nada, funcionó perfectamente y lo terminamos generalizando”, contó a Bichos de Campo el investigador en desarrollo y experimentación de biocombustibles.
El ensayo, que duró poco más de un año, estuvo “ceñido” a las normas de experimentación. Por eso se realizaron análisis y toma de muestras de manera continua tanto del biocombustible, como de los lubricantes que utilizan los vehículos.
“Tengo mucha experiencia. Toda mi vida trabajé en las terminales de marcas reconocidas y cuando hicimos este ensayo lo hicimos de acuerdo a normas muy estrictas. Analizamos desde los gases de escape, el combustible en los tanques, inclusive hasta la calidad del biodiesel al salir de la planta, porque no se puede usar cualquier biodiesel”, explicó el ingeniero Garibaldi.
-¿Qué condiciones ineludibles debe tener el biodiésel para ser utilizado como combustible 100% en vehículos pesados?
-En primer lugar debe ser un biodiésel certificado que cumpla con las normas establecidas. Si se aparta de esas normas de fabricación entonces si hay problemas. El proceso de fabricar el biodiesel, implica hacer un aceite que requiere un proceso de mayor costo. La prueba final de biodiésel, es realizar un ensayo físico-químico y, si cumple con esa especificación entonces se puede utilizar.
Para el ingeniero, con más de 30 años de trayectoria experimentando con combustibles, los problemas asociados al uso de biodiesel únicamente pueden aparecer si se cometen errores durante la fabricación o si el biocombustible no está correctamente almacenado.
-¿Todos las marcas de vehículos responden satisfactoriamente al biodiesel?
–Es cierto que no todos los vehículos responde de igual manera. Hay macas que son más sensibles al biodiesel. Por una cuestión de pulverización y de mayor viscosidad, hay tendencia a quedarse adherido a las paredes de los cilindros y hace que se contamine con mayor facilidad el aceite. Pero no pasa nada, porque el biodiesel es un excelente lubricante y el motor no lo nota. Pero esto solo lo hemos visto en una marca, que no menciono por razones obvias.
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-Dice que es muy importante el almacenamiento del biodiesel ¿Cómo debe hacerse y por qué es tan estricto con eso?
-Los tanques debe estar absolutamente limpios, no pueden ser tanques que contengan residuos de biodiesel degradado o de otro tipo. Deben ser renovados por lo menos cada tres meses. Aunque existen aditivos que permiten almacenar el biodiesel durante un año, pero tal y como lo provee el fabricante exige renovación de los envases .Sin embargo en lugares de flota no tienen problema porque consumen gran cantidad de biodiesel.
Sobre este particular, el ingeniero señaló que deben tomarse reiteradas muestras de los tanques, para evitar la acumulación de agua por humedad, que generalmente suele encontrase en el fondo de los recipientes.
-¿Cuál es el biodiesel más eficiente?
-Tuvimos muy buena experiencia con el biodiesel derivado de la soja. Las pruebas que hicimos, no solo fueron en Rosario. También hicimos un ensayo en Uruguay, para ALUR (Alcoholes del Uruguay). Hicimos pruebas con alcohol y con biodiesel, y el biodiesel de ellos no era derivado de soja, sino de grasa animal, y mientras se ajustaban a las normas de calidad del biodiesel no tuvieron problemas. No importa el origen, interesa que se cumpla con las especificaciones.
-Se habla de los biocombustibles y su impacto positivo en el medioambiente a diferencia de los combustibles convencionales ¿en este ensayo se pudo probar esta premisa?
-Hay que destacar que con las muestras de los gases de escape, nos dimos cuenta que hay una notable reducción de humo. Se puede decir que los gases son menos tóxicos, estamos hablando de un 60% de menos toxicidad de los gases comunes del gasoil.
-Atendiendo al contexto de escasez de combustibles, ¿cuáles son las posibilidades reales de Argentina con el uso de biodiesel?
-Las posibilidades para Argentina son muy buenas, porque somos muy buenos productores de oleaginosas. El biodiesel funciona con cualquier motor diesel actualizado, particularmente para todo lo que es maquinaria vial y maquinaria pesada funciona perfectamente bien. En Argentina el biodiesel es un sustituto importante del gasoil dentro de la agroindustria y se utiliza de forma legal e ilegal. Los combustibles en Argentina, al estar cargados impositivamente, provoca que existan productores que cambian granos por biocombustible.