La posibilidad de que Brasil logre una gran cosecha de soja en la campaña 2023/24 se aleja cada vez más ante la aparición de pronósticos climáticos que complican de manera creciente el panorama vigente.
Un informe especial publicado por la agencia meteorológica brasileña (Inmet) proyectó que hasta el próximo 16 de noviembre seguirán registrándose precipitaciones superiores a las normales en buena parte del sur del país, mientras que lo contrario ocurriría en el norte.
En cuanto a la previsión de almacenamiento de agua útil en el suelo para el próximo mes de noviembre de 2023, la estimación es que un sector del nordeste del país podría experimentar una situación crítica por déficit de humedad.
“Es de destacar que, con la acción del fenómeno de El Niño, existe probabilidad de que se presenten grandes volúmenes de lluvia en algunas zonas, lo que podría contribuir a un aumento de los niveles de agua en el suelo con valores superiores al 90%, generando incluso excesos hídricos en la región sur del país”, remarcó el informe de Inmet.
“En otras zonas, los niveles de agua en el suelo permanecerán bajos debido a la previsión de reducción de las precipitaciones en el nordeste y parte del norte, incluidas zonas de Matopiba (área que cubre los estados de Maranhão, Tocantins, Piauí y Bahía) y Sealba (área entre los estados de Sergipe, Alagoas y noreste de Bahía), lo que podría impactar negativamente los niveles de almacenamiento de agua en el suelo, agravando el déficit hídrico”, añadió.
En tanto, en áreas de Mato Grosso, Goiás, el centro y norte de Minas Gerais, Espírito Santo y el noroeste de São Paulo la irregularidad espacial de las precipitaciones seguiría manteniendo el almacenamiento de agua en niveles más bajos que los normales.
Un informe de la consultora brasileña Pátria Agronegócios indica que hasta ayer viernes 20 de octubre se había logrado sembrar casi un 30% del área prevista de soja, una cifra inferior a la registrada en las últimas dos campañas. En la región del Cerrado brasileño las siembras avanzan según lo planeado a la espera de lluvias abundantes que, por el momento, no se presentaron.