Todos saben que Argentina es un gran productor de soja. Pero pocos conocen que es una gran elaborador de soja desactivada, un producto que –a pesar de contar con un nombre por demás extraño– es esencial para muchas actividades productivas.
En el año 2022 se registraron Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de soja desactivada por 71.014 toneladas, la mayor parte de las cuales fue realizada por un puñado de empresas.
En el primer lugar del ranking, con 18.873 toneladas registradas en 2022, se encuentra la mendocina Agroin Las Piedras, controlada por el grupo chileno Soprodi, que se radicó en el país con el propósito de exportar soja procesada o desactivada a grandes planteles de aves en Chile, aunque posteriormente se diversificó hacia otros negocios agroindustriales.
Inmediatamente después –con 16.905 toneladas– se ubica la cordobesa Insumos y Acopios del Sur, localizada en Río Cuarto y presidida por el empresario Diego Oggero, quien además es campeón de TC Pista 4000 con un Torino que la “rompe” en las pistas de carrera.
El tercer lugar es para la firma JM y Cía S.A.S, presidida por el contador cordobés Luis Javier Molina, mientras que en el cuarto aparece Constantini y Asociados, una corredora rosarina fundada en 2003 por Leandro Constantini y Víctor Monti.
Luego siguen en el ranking Del Plata Trading Company, al tiempo que en el sexto puesto aparece Vasquetto Nutrición Animal, compañía con base en Río Cuarto creada en 1995 como distribuidora de productos veterinarios y alimentos balanceados que posteriormente comenzó a elaborar y exportar, además de soja desactivada, pellets de alfalfa y alimentos balanceados tanto para uso agropecuario como para mascotas.
En el séptimo lugar figura la cordobesa Alimentos Tancacha, que produce soja desactivada tanto por aire caliente como por extrusión, además de expeller de soja, aceite crudo de soja y maíz y sorgo pregelatinizado. La firma es presidida por Ricardo Daniel Gentili.
La soja desactivada se obtiene a partir de diferentes tratamientos térmicos que mejoran las propiedades nutricionales del poroto para alimentación animal.
El proceso de desactivado radica principalmente en el tratamiento de soja cruda mediante una cocción a vapor con el propósito de modificar el índice de actividad ureasica propio de la soja, de manera tal de amentar la digestibilidad de la proteína con destino a alimentación animal.