Los precios de los contratos futuros de cereales subían este jueves en el mercado estadounidense CME Group (“Chicago”) ante la incertidumbre presente sobre el futuro del acuerdo existente entre Rusia, Turquía y Naciones Unidas –denominado “corredor granario”– que permite la exportación de productos agroindustriales desde puertos ucranianos.
Ayer el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, enfatizó en una reunión con su homólogo turco, Mevlut Cavusoglu, que el acuerdo del corredor granario sólo podría extenderse si se tienen en cuenta los intereses de los exportadores rusos de productos agrícolas y fertilizantes.
Este jueves, durante la Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores del G20 que se está llevando a cabo en Nueva Delhi, India, Lavrov afirmó que “se están lanzando obstrucciones abiertamente contra las exportaciones de productos agrícolas rusos a nivel mundial, sin importar cómo los representantes de la Unión Europea convenzan a todos de que no es así”.
“La causa de la crisis está en las acciones de Occidente, que imprimió billones de dólares y euros al comienzo de la pandemia de la Covid-19, comprando febrilmente reservas de alimentos en todo el mundo”, dijo el máximo diplomático ruso según publicó la agencia oficial Tass, para luego denunciar que “la mayor parte de los suministros de cereales de Ucrania se destinan a precios de dumping como forraje para la Unión Europea y no para los países más pobres”.
Las dificultades originadas por el conflicto ruso-ucraniano desplomaron los valores FOB de trigo, el maíz y aceite de girasol ucraniano, lo que representa un gran negocio para aquellas naciones que se abastecen con el mismo.
El acuerdo del “corredor granario” se instrumentó el 22 de julio de 2022 por un período de 120 días con el propósito de garantizar la seguridad de los embarques ucranianos realizados desde los puertos de Odessa, Chernomorsk y Yuzhny controlados por Kiev. En noviembre, el acuerdo de granos se extendió por otros 120 días.
Los valores del trigo en el CME Group terminaron con subas intradiarias en las jornadas de este jueves, mientras que los de maíz, si bien durante la mayor parte de la jornada operaron en positivo, al final de la rueda cayeron en las posiciones correspondientes al ciclo comercial 2022/23 de EE.UU. (no así en lo que respecta a la próxima campaña).
Los motivos de tal reversión se explican ante el escenario de que las compras de maíz por parte de China tenderán a focalizar en Brasil en desmedro de EE.UU. por una cuestión geopolítica. Adicionalmente, el gobieno de Xi Jinping está negociado la posibilidad de importar también maíz de origen argentino.