El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) decomisó el pasado martes 18.000 plantines de cítricos en un vivero de la provincia de Tucumán, en el marco de una inspección para prevenir el Huanglongbing (HLB), una enfermedad que afecta a este tipo de plantas y es diseminada por un insecto vector: la temible “chicharrita”.
La razón del decomiso fue que los agentes del Centro Regional NOA Sur encontraron que las instalaciones transgredían la norma fijada por la Resolución 930/2009 de Senasa, que indica que “todo el material de propagación de cítricos incluida la planta terminada, debe producirse y mantenerse en viveros bajo cobertura impermeable al agua y con todas las aberturas protegidas con tela de malla antiinsectos, como medida fitosanitaria tendiente a minimizar el riesgo de ingreso de la enfermedad HLB”.
Así, los invernaderos deben estar cubiertos con mallas antiáfidos, tener doble puerta y aplicar medidas de desinfección entre otros requisitos.
Las medidas mencionadas forman parte del Programa Nacional de Sanidad de Material de Propagación Vegetal del Senasa y tienen por fin asegurar que el material vegetal que se planta posteriormente en fincas del territorio nacional cumpla con las normas sanitarias.
“En la tarea de fiscalización de los viveros garantizamos la sanidad del material vegetal”, explicó Gustavo Dadda, coordinador de Protección Vegetal del Centro Regional Noa Sur del Senasa.
“En éste caso puntual es importante destacar que el productor dueño de las plantas cítricas comprendió la problemática y colaboró en todo momento con las tareas de decomiso y eliminación facilitando personal para realizar la tarea con machetes y motosierras. Posteriormente todo se incineró”, remarcó el funcionario.